Las historias de amor y dedicación de algunas súper mamás de San Antonio
Verónica Contreras tiene distonía y su hija la postuló para ser premiada por Farkas. Patricia Sembler cuida a su nieta con microcefalia hace 12 años.
Apenas Nathaly Polanco supo del concurso con que Leonardo Farkas premiaría con seis millones de pesos a las súper mamás de Chile, no dudó en querer postular a su madre Verónica Contreras. "Es que sufre distonía hace 30 años, pero está tratando de hacer cosas nuevas todos los días y por eso la admiro mucho", explicó la joven.
"La distonía generalizada, que es la que tiene ella, es una enfermedad degenerativa que le complica para comer, hablar y caminar, pero ella es valiente y hace todas las cosas de la casa", contó Nathaly.
Por eso la joven, que vive en El Tabo junto a su familia, subió dos videos con el hasthag #Farkasdiadelamadre donde se muestran las dificultades de movilidad con que su mamá realiza, por ejemplo, el almuerzo para la familia.
"Cuando mi mamá recibió el diagnóstico ya estaba casada con mi papá y a pesar de saber que si se embarazaba su enfermedad se podía agravar, igual decidió tenernos a mi hermano y a mí", dijo Nathaly. "Incluso cuando nos tuvo, le dio una hemorragia muy grande y su enfermedad avanzó mucho, pero eso no impidió que nos cuidara y nos sacara adelante", completó la hija.
Al preguntarle qué haría en caso de recibir el premio de Farkas, Nathaly es clara en señalar que "lo ideal sería comprar la silla de ruedas que necesita, porque ya se ha caído en la calle y se ha quebrado costillas. Lo bueno es que el tratamiento con la toxina que se inyecta cada tres meses en la lengua (y que vale entre 300 y 500 mil pesos), ahora lo está recibiendo gratis por el hospital", señaló la joven.
"En realidad el premio sería para comprar todo lo que ella necesita, porque no siempre lo pasa bien, aunque lo intenta todos los días. A veces la gente en la calle se burla de ella, porque no entienden lo que vive y ella se deprime", señaló.
Mamá-Abuela
Patricia Sembler tiene tres hijas y cuando creyó que había llegado el momento de disfrutar la vida sola con su esposo les llegó un regalo muy especial.
"Mi hija tuvo a Camilita y en su parto hubo complicaciones, por lo que la niña se asfixió y nació con microcefalia, es decir, que ella no puede caminar, no habla, pero escucha y entiende, porque es muy regalona", contó con la mirada llena de amor la mujer de 53 años.
"Cuando se acabó el post natal de la mamá, otra hija se quedó cuidándola en Santiago, porque ella vivía allá. Un fin de semana que vinieron, le dije que me la dejaran y desde ahí ella nunca más quiso irse. Cuando mi hija volvió a buscarla, a la otra semana, ella lloró y gritó, entonces le dije que la dejara conmigo. Fue como que ella me eligió", señaló la mujer.
Al principio, los médicos le dieron poco tiempo de vida a Camila, "pero ya lleva 12 años con nosotros y es muy regalona de su abuelo, entonces aunque ya nos han dicho que solo hay que disfrutarla, nosotros tenemos fe y ella está muy bien", contó Patricia.
Esta madre-abuela señaló también que siempre le ha dejado en claro a la niña que ella es la abuelita, pero la abuela-mamá, porque su vida gira en torno a la pequeña. "No voy a decir que este camino ha sido siempre fácil, porque a ella no le gusta estar en lugares con mucha gente, entonces no se puede ni salir mucho. A veces me canso y me enojo, no me pueden ni mirar, pero ella como que siente y me empieza a hablar y se me pasa todo. Me da fuerzas", finalizó Patricia.