La academia que quiere dejar su legado en la danza sanantonina
Hace dos años que Guillermo Mella junto a Nicolás Abarca instalaron el estudio de danza "Shut Up & Dance" en Llolleo y actualmente ya cuentan con más de 140 integrantes que ya están logrando distinciones en competencias nacionales.
Guillermo Mella soñó desde chico con tener una academia de baile donde los sanantoninos amantes del ritmo pudieran desarrollarse de manera íntegra. Su formación la tuvo que hacer prácticamente entera en Santiago, desarrollando algunos talleres esporádicos en San Antonio cuando era adolescente, pero nada más allá de eso.
"Estuve desde los 18 años hasta los 24 realizando talleres y estudios de danza en Santiago. Acá la verdad era limitado lo que había como opciones para proyectarse y tampoco existía el área que yo quería ejercer. Faltaban más entregas de estilo, otras ramas de la danza, como urbanos, hip-hop, entonces la única forma que había era salir de San Antonio", reflexiona Guillermo.
Tras realizar sus estudios, Guillermo junto a otro grupo de bailarines le dieron vida hace seis años atrás en la ciudad puerto al grupo de baile Shut Up & Dance. Comenzaron arrendado un espacio en un gimnasio donde ensayaban las coreografías una vez a la semana.
"De a poco se fue armando un grupo que empezó con tres personas que con el tiempo se fue consolidando hasta llegar a más de treinta integrantes, con los que desarrollamos durante un buen tiempo clases de varias ramas de la danza urbana que serían los comienzos de la academia", detalla Mella.
Sería en septiembre del 2015 la fecha de la consolidación de Shut Up & Dance. En calle Inmaculada Concepción, en pleno corazón de Llolleo, comenzó el gran sueño del joven bailarín Guillermo Mella. Junto a su pareja Nicolás Abarca, se instalaron con el estudio de danza que el día de hoy cuenta con más de 140 alumnos de diferentes edades.
"Mi meta personal siempre fue formar una academia de danza porque nunca tuve la oportunidad de estar en una en San Antonio. A los 15 años comencé a involucrarme de lleno con la danza y me inscribí en los talleres gratuitos que hacían en ese tiempo, que eran de danza contemporánea. Ahí gracias a una profesara pude conocer a Rodrigo Cartagena, quien trabajaba en la academia del reconocido coreógrafo Hugo Urrutia, y él me empezó a hacer clases particulares. Entonces mi gran propósito era poder entregar con el tiempo un espacio que pudimos ir consolidando estos dos años que ha estado funcionando y siempre mi propósito fue ese, hacer mi propia academia", reconoce Guillermo, quien actualmente tiene 28 años de edad.
"Sabemos que fuimos los primeros en establecernos como academia fija en la comuna, con clases todos los días y que es completamente abierta a la comunidad. Acá tenemos desde los tres años de edad alumnas hasta algunas sobre los 60 años, no hay un límite, tenemos para todos los gustos y edades. Lo que sí, el 90 por ciento son alumnas, por lo que falta más motivación de los hombres a no tener vergüenza a venir a participar de las clases. Nosotros no nos basamos en un solo estilo, sino en diferentes como área latina, ritmos urbanos, incluso seminarios de cueca", agrega Nicolás Abarca, quien es el encargado del área administrativa de la academia.
Dentro de la proyección que tienen las alumnas, existe la posibilidad de seguir desarrollándose en la danza hasta convertirlo en una carrera profesional. "Ahora una chica que empezó con nosotros va a estudiar danza en Santiago, y ya tiene las herramientas para afrontar esta carrera. Si bien hay muchas chicas que vienen por hobbie, para pasarlo bien, otras quieren profesionalizarse y proyectarse dentro de la danza", acota Guillermo Mella.
Consolidados
El domingo pasado, cinco cuadros con integrantes del estudio Shut Up & Dance de San Antonio dijeron presente en el concurso "We Just Dance Competition 2017" que es organizado por la prestigiosa academia capitalina "Elite Dance Center" y que en esta oportunidad se llevó a cabo en el "Club Divino".
"Esta competencia es una de la más prestigiosa del país, trae incluso un jurado internacional, por lo que es muy importante participar en ella. Había jueces desde México, España, Argentina y Estados Unidos. En la mañana, cuando competían los juniors, se presentaron 63 cuadros, y en la tarde bailaron otros 54 cuadros", explica Nicolás Abarca.
Para este evento, el contingente sanantonino se presentó en la categoría Junior con el grupo de pre-juvenil, y en Adulto con cuadros en las categorías Street, Jazz y Solo, además de Jazz Small Group.
"El año pasado habíamos participado y sacamos un excelente segundo lugar, pero solamente fuimos con un grupo que era pre-juvenil, de 9 a 14 años. Este año ya llevamos más competidores que pudieron presentar sus rutinas ante el exigente jurado. Y nuevamente pudimos traernos un gran reconocimiento porque el curso pre-juvenil logró sacar el primer lugar en Jazz Junior y además conseguimos dos terceros lugares en las competencias de Jazz Small Group y Large Group Jazz Adultos. Acá hay un gran trabajo de parte de los alumnos y también de los profesores, eso es muy destacable", reconoce Guillermo Mella, quien con entusiasmo afirma que de aquí para adelante "la idea es poder ir con todos los alumnos de la academia a las futuras competencias a las que iremos a participar. Hasta el momento somos los únicos representantes de la provincia en este tipo de concursos".
Más apoyo
Guillermo Mella y Nicolás Abarca explican que este proyecto artístico ha sido sustentado totalmente por ellos. "La municipalidad cuando hemos necesitado nos han ayudado, pero ahora queremos seguir saliendo a otras competencias. Nos gustaría mas apoyo en todo, porque somos 100 por ciento independientes y toda la inversión del estudio en Llolleo es nuestra", reconoce Nicolás.
"Nos serviría una ayuda para solventar vestuarios y calzados, que son lo más costoso. Toda ayuda siempre será bien recibida y agradecida", indica Guillermo Mella, quien muy convencido del proyecto artístico que está construyendo, exclama que "pretendo tener la academia hasta el día que me muera, que pasen muchas generaciones. Quiero ser el formador de los futuros bailarines de danza de la provincia de San Antonio".