Religiosos de toda la Diócesis celebraron en San Antonio el Día de la Vida Consagrada
Las hermanas de Bellavista fueron las anfitrionas en una jornada en donde también los católicos recordaron la Asunción de la Virgen María.
La hermana Cristina Hoar llegó desde Indonesia a la localidad de El Monte, en la Región Metropolitana, hace 30 años. La congregación misionera a la cual pertenece desde los 20 años, la envió para trabajar codo a codo con la pastoral y con los campesinos del sector.
Actualmente su labor está enfocada en el trabajo con los niños y eso la tiene muy contenta. "Hace 47 años pertenezco a las Misioneras Siervas del Espíritu Santo y mi experiencia en Chile ha sido muy bonita. Yo estoy muy a gusto en este país", dijo Cristina Hoar.
-¿Cuándo decidió consagrar su vida a Dios?
-Me gustaba mucho servir a la gente y para eso nunca me faltó la alegría. Me encanta lo que hago. Nosotros fuimos fundadas en Alemania y estamos en 42 países y en la actualidad somos 3 mil 800 religiosas.
La hermana Anita Ramos, de las religiosas del Sagrado Corazón de Jesús, sintió el llamado de Dios cuando apenas tenía 20 años. Ella vive junto a otras tres religiosas (Gladys, Filomena y Marialina) en la comuna de Alhué. donde están a cargo de la pastoral.
"Descubrí mi vocación desde una experiencia de iglesia", contó la religiosa, quien agregó que "estuve acompañada por las religiosas del Sagrado Corazón en la pastoral juvenil y desde ahí fui cultivando mi compromiso como joven creyente y cristiana. Fue ahí también cuando mi compromiso se fue haciendo mayor y descubrí que había un llamado a la consagración. Para ser feliz, mi proyecto de vida se encaminaba hacia Jesús".
Celebración
Ambas mujeres participaron ayer en un importante celebración, que reunió a unos cuarenta religiosos y religiosas pertenecientes a la Diócesis de Melipilla y que tuvo como anfitrionas a las hermanas de Bellavista.
"El 15 de agosto es una fecha muy importante para la iglesia porque es la Asunción de la Virgen y junto con ello se celebra también el Día de la Vida Consagrada", explicó el párroco de San Antonio, Vicente Véliz.
Todos los años, distintas instituciones religiosas se reúnen a celebrar este importante día en diversos puntos. Este año la ciudad escogida fue San Antonio. "Han venido personas desde Peñaflor, Curacaví, Alhué, entre otras sectores", detalló el padre Vicente.
Según lo manifestado por el párroco de la comuna puerto, el festejo consistió en el desarrollo de algunas actividades y al mediodía los asistentes participaron de una misa que estuvo oficiada por el obispo de Melipilla, monseñor Cristián Contreras.
"La Iglesia ha querido celebrar en este día la vida consagrada y la vida religiosa, en donde varones y mujeres se han entregado al Señor porque justamente creen en este destino", sostuvo monseñor Contreras.