Funcionarios, comerciantes y voluntarias llevaron la Navidad a los niños de Pediatría
Un grupo de locatarios de Llolleo y las Damas de Rojo se encargaron de entregar regalos a los pequeños que estaban internados en esta unidad del hospital Claudio Vicuña de San Antonio. Hace varias semanas, las funcionarias decoraron el lugar con materiales 100% reciclados.
El Viejito Pascuero y sus ayudantes tuvieron una ajetreada agenda en la comuna de San Antonio.
El mediodía del sábado, cuando faltaban pocas horas para la Nochebuena, un grupo de comerciantes de Llolleo recorrió el Servicio de Pediatría del hospital Claudio Vicuña de San Antonio para entregar regalos a los niños que se encontraban internados en esta unidad.
Arreglos
El lugar hace varias semanas lucía una hermosa decoración para las festividades "que fue hecha por los funcionarios del servicio con materiales totalmente reciclados", según contó la enfermera supervisora de Yani Palomino, mientras esperaba el paso de también denominado "San Nicolás".
Además del acompañamiento de sus padres, los menores recibieron el cariño de las Damas de Rojo, quienes durante la semana recorrieron cada rincón del centro asistencial para mantener viva la magia de la Navidad entre quienes permanecían internados en él.
Damas de rojo
"Esta es una tradición que hacemos todos los años. Nos preparamos con anticipación, porque entendemos que muchos pacientes, fundamentalmente los niños, pueden sentirse más deprimidos en esta época porque no disfrutan como los demás", expresó Isabel Urrejola, una de las integrantes del voluntariado.
Pero eso no es todo. Un grupo de comerciantes llolleínos igualmente fijó sus ojos en Pediatría para hacer una buena acción de fin de año.
Comerciantes
Hace dos meses los comerciantes organizaron diversas actividades sociales y "de acercamiento con la comunidad", según contó el locatario Gabriel Salinas.
"Estas fiestas nos cayeron súper bien. Lo primero que hicimos fue una celebración en la Plaza de Llolleo, donde tuvimos una actividad con niños con capacidades diferentes. Hablamos con el alcalde Omar Vera y con el Departamento de Cultura, quienes nos facilitaron un escenario y la amplificación para tener un espectáculo de danza y teatro", relata.
"La idea era llegar solo a un grupo de pequeños, pero luego nos dimos cuenta que no podíamos discriminar entre uno y otro. Estábamos en un lugar público y terminamos por entregar más de trescientas bolsas de dulces, en un evento al que concurrieron más de mil personas contando a los padres", describe.
"Estuvimos casi tres horas y fue posible gracias a la motivación de más de cien comerciantes de Llolleo. Hay que darles las gracias a ellos también", resaltó.
Finalmente, poco antes de la llegada del Viejo Pascuero, visitaron Pediatría.
"Nunca imaginamos que sería así de emocionante. Porque esta es una fiesta para los niños. Son lo más importante. Sabemos que a ellos les gustaría estar en sus casas en esos momentos, pero tienen que hacerle caso a los doctores y quedarse ahí porque están complicados de salud", dijo.