Mujer recién nacida, eres una estrella más en el corazón de la esperanza.
Mujer niña, capullo de sueños y fragancias infantiles.
Mujer mujer, es llegar a las estrellas más lejanas al alcance de mi voz.
Mujer Madre, nunca dejes de dar el néctar sagrado de la vida.
Mujer esposa, te inicias al alba sobre el resplandor de la aurora,
Para morir al alba bajo la oscuridad posterior al crepúsculo.
Durante su existencia es luz y en el transcurso de la vida esperanza.
Y nunca más soledades infinitas en mi alma.
Mujer abuela, encontrarás sus ojos en otros de mirada más intensa.
Y besarás el contorno de su sonrisa con cariño celestial.
Mujer Patria, te levantas del dolor y del olvido,
Aumentas el calor de tu mirada
Y con la fuerza de tu alma,
Mil veces volverá la paz,
Mil veces volverá el amor.
Luis Campos Palma