La historia de los emprendedores que prenden la noche sanantonina
Sebastián Ojeda y Francisco Álvarez son los dueños del Bar Piedra Roja, un local de Llolleo que lleva casi tres años en funcionamiento y se caracteriza por abrir sus puertas a bandas y artistas de distintos estilos musicales.
Hace más de tres años, el sanantonino Sebastián Ojeda (31) comenzó a gestar una arriesgada idea: tener su propio bar en la comuna.
"Soy músico y debido a esto conocía muchos bares, donde no se les ofrecía a los artistas las condiciones adecuadas para tocar, por lo que tuve la idea y las ganas de tener mi propio bar, donde la gente pudiera pasarla bien y escuchar bandas en buena calidad de sonido", cuenta Ojeda.
Justo en ese momento surgió la oportunidad de arrendar el local de avenida Chile 523, donde inauguraron el "Piedra Roja Bar y Cervecería".
"Piedra Roja fue un festival de rock al aire libre que se hizo en Chile en octubre de 1970. Este festival es como el Woodstock (un festival muy famoso realizado en Estados Unidos en 1969). Mi idea era enfocar el bar a este estilo de música, pero no de manera excluyente, y por eso le puse este nombre", explica el fundador.
Más estilos
En los primeros años, el bar estuvo más cargado al rock, con presentaciones de bandas de este estilo, pero hace un año empezó una apertura.
"Hace un año el Fran (Francisco Álvarez) se hizo socio del local y desde ahí comenzó a gestarse un cambio", dice Ojeda.
Álvarez cuenta que "llegué con la idea de ampliar aún más el espectro musical. De esas conversaciones surgieron los martes de cueca, los miércoles de música electrónica, los jueves de dance hall y los viernes y sábados para ver en vivo a bandas nacionales y locales".
-¿Cómo ha sido la respuesta de los clientes a su propuesta?
-Sebastián Ojeda: La gente lo ha tomado de forma sensacional. Nosotros partimos con miedo. Por ejemplo, con lo de las cuecas, porque el primer martes vinieron 10 a 15 personas.
-Francisco Álvarez.: Eso se hizo para rescatar la bohemia de San Antonio. De hecho, somos los pioneros en hacer este tipo de fiestas y aunque no partimos muy bien, ahora nos va excelente y llega mucha gente. Los martes parecen sábados.
Ojeda manifiesta que una de las claves del éxito del local "es que acá no hay prejuicios. En este bar, a diferencia de otros, nadie se fija como andas vestido, si tienes plata o no. Este local es pura buena onda, con un buen ambiente y creo que eso hace que nos prefieran".
La otra clave, para ellos, es que "nos hemos preocupado de que la gente sienta que somos una familia, sienta que llegó a su casa, y eso parte de una buena atención y un espacio bien cuidado", reflexiona Ojeda.
Escenario para bandas
Otro punto importante para los dueños -ambos integrantes de la banda Choro e' Playa- es brindar un escenario a las bandas locales.
"Tenemos el espacio abierto para que bandas locales puedan presentar su material al público, incluso nosotros los ayudamos pasándoles las utilidades de las entradas, porque como músicos sabemos lo que es y cómo muchas veces se les exige a las bandas pagar para tocar", indica Álvarez.
Aunque ellos ponen sus condiciones: "Les exigimos las condiciones mínimas para tocar, que nos manden grabaciones de su material en vivo para conocer la calidad de su trabajo, porque nuestra idea es ofrecer un espacio, pero también asegurarnos que nuestro público pueda disfrutar música de calidad", dice Ojeda.
Para conocer más sobre el bar y sus eventos pueden visitar el Facebook Piedra Roja Bar Llo-Lleo.