Con respecto a la falta de presupuesto especial para el plan de resolución de listas de espera de cirugías, impulsado por el Ministerio de Salud y la Subsecretaría de Redes Asistenciales, y que requiere de una inyección de $80 mil millones para ejecutar un total de 286 mil operaciones que están pendientes, consideramos que actualmente existen recursos valiosos de esta cartera de gobierno que podrían utilizarse para ejecutar planes ante urgencias como ésta, pero que se están destinando a personas que no están verdaderamente enfermas. Con esto me refiero al malgasto en el pago de licencias médicas injustificadas.
Según un estudio de Cadem, en conjunto con la Asociación de Isapres, el 5% de las personas reconoce que alguna vez han utilizado una licencia médica sin estar realmente enfermo, delito que implica un gasto para Fonasa e Isapres de $55 mil millones (US$ 87 millones). Junto con eso, se estima que entre un 25% y un 30% del gasto se destina a financiar licencias médicas injustificadas, lo cual provoca anualmente, un impacto al sistema de US$ 300 millones (US$220 al sector público).
Es importante que como sociedad tomemos conciencia del gran gasto que se le provoca al sistema de salud por el uso injustificado de licencias médicas. Se deben generar medidas para controlar y fiscalizar este subsidio, al igual que educar a las personas sobre su mal uso y las sanciones que conlleva este delito que nos afecta a todos.
Álvaro Díaz
Gerente general
Inmune
