"Aquí no hay un juicio por estafa, ni de ningún otro ilícito que no sea exclusivamente las injurias que cometió Jeannette Escobar contra Gloria Heresman", declaró la abogada Graciela Salazar para referirse a una audiencia realizada la semana pasada en el Tribunal de Garantía de San Antonio.

De acuerdo a lo revelado por la acusada de injurias, Jeannette Escobar, esta imputación en su contra "no se trata más que un acto desesperado de esta mujer, porque dice que yo rompí su imagen como pastora. Ella que es tan buena y ha utilizado la fe para estafar a tantas personas".

"Mi representada, Gloria Heresmann, considera que fue ofendida en un espacio público por otra persona y es el tribunal el que se pronunciará finalmente al respecto", puntualizó la abogada Salazar.

En la audiencia, el juez determinó que la preparación del juicio simplificado por la denuncia de injurias quedara fijada para el martes 29 de mayo, a las 10 horas.

Ana María Valenzuela Soto, quien acudió a la audiencia, declaró a Diario El Líder que ella y su madre, Clotilde, también fueron víctimas de una millonaria estafa por parte de la pastora Gloria Heresmann y que, junto a varias otras víctimas iniciaron hace varios años una demanda contra ella.

"Tuvimos que quitarle nuestra propiedad con un juicio y todavía no nos responde por todos los daños y las deudas que dejó en nuestra propiedad. Y así son muchos casos más que se han ido sumando, por muchas personas que la acusan de estafa", dijeron.

Crónica

El párroco de San Antonio Vicente Véliz, insistió en su llamado a la unidad a la comunidad de Placilla, tras un incidente ocurrido ayer en la capilla San José Obrero donde un hombre irrumpió abruptamente insultando a un ministro católico que se preparaba a oficiar una liturgia.

Según el párroco, se presume que el agresor estaba molesto por la publicación de Diario El Líder de ayer donde se daba a conocer que la parroquia había ganado el juicio por las llaves de la propiedad de la capilla.

"De acuerdo a lo que me informaron desde la comunidad de la capilla, antes de comenzar la liturgia (pasadas las 11 horas), un señor habría increpado de manera bastante soez a uno de los miembros de la comunidad. Pero finalmente me indicaron que solamente fue una catarsis propia de esas reacciones, y que la comunidad había reaccionado muy bien y que en realidad no había sucedido ningún incidente", detalló el religioso.

Véliz enfatiza que los fieles que retomaron las actividades en el sector, no están dispuestos a responder ni a continuar con declaraciones cruzadas que fomenten un clima de tensión.

No entran en el juego

"Ellos no quieren seguir el juego, porque lo que ven es que hay más un ambiente de paz que de discordia. Este fue un hecho puntual de una persona y seguramente se trata de alguien que no ha logrado entender el vuelco que tomó la comunidad en general. Porque la gente comenzó a darse cuenta que la división no le está haciendo bien. Por esa razón hay algunos que insisten en contribuir a la división, pero no hubo agresiones físicas ni nada. Fue una alteración de palabras que también fue bastante contenida por quien, lamentablemente las recibió, ya que entendió que no venía al caso responderle", agregó el sacerdote.

Pidiendo no ser identificada, para evitar provocaciones, una de las asistentes a la liturgia que fue testigo de los hechos, relató a Diario El líder que el hombre había ingresado a la capilla en dirección hacia el ministro y "le reclamó que nosotros habíamos llamado al diario para que escribieran lo que nosotros queríamos y sin dar oportunidad de hablar comenzó a decirnos una cantidad de garabatos. Pero nadie le contestó nada, porque evidentemente quería pelear".

"Nosotros preferimos dejar las cosas como están, porque nosotros venimos a esta capilla para desarrollarnos espiritualmente y entrar en una nueva polémica con dimes y diretes no nos va a llevar a ninguna parte", agregó.

11 horas de ayer, antes de comenzar la liturgia, ingresó el hombre lanzando improperios contra el ministro católico.