Carolina Bustos Muñoz

Un catastro realizado por la Dirección de Medio Ambiente, Aseo y Ornato (Dimao) de la Municipalidad de San Antonio dejó al descubierto el sector "más sucio" de la comuna debido a los microbasurales que los propios vecinos han ido formando al depositar sus desperdicios en cualquier lugar.

Según lo explicado por Ernig Muñoz, directora de la Dimao, Llolleo lidera este "triste ránking", ya que es aquí donde justamente existen los puntos de más conflicto.

Las calles Julio Letelier, Olegario Henríquez, Baquedano (al costado del Instituto del Puerto), Central (a la altura del recinto deportivo de Torino), las poblaciones Colinas de Llolleo 1 y 2 y el fundo de Llolleo se han transformado en un verdadero dolor de cabeza para el municipio, principalmente por la falta de conciencia de algunos sanantoninos.

"El tema de los microbasurales es un tema de nunca acabar", dijo con algo de frustración Ernig Muñoz. "En calle Olegario Henríquez, por ejemplo, se han hecho remodelaciones, por lo que la gente ha ido corriendo el microbasural. En Julio Letelier se limpia un día y al otro está lleno de basura de nuevo", agregó.

Esta situación se repite en de Colinas de Llolleo 1 y 2, justo detrás de los departamentos, "donde hemos detectado que la gente bota la basura domiciliaria a la calle, a pesar que el camión recolector pasa tres veces por semana".

Los cerros de San Antonio centro y norte le siguen a Llolleo con respecto a la cantidad de microbasurales registrados. "Acá tenemos a Placilla, calle Los Papayos en cerro Arena, detrás del cementerio parroquial y calle Manuel Bulnes", dijo.

"Camino Viejo a Cartagena también es un punto de conflicto. En este sector está ubicado el vertedero, pero eso no quiere decir que todo el camino sea un vertedero, a pesar de eso ahí siempre hay basura", explicó.

Barrancas ocupa el tercer lugar de esta lista, pero eso no significa que esté libre de microbasurales.

"En Manuel Montt se hicieron remodelaciones por lo que la gente comenzó a lanzar la basura en calle Maule. En Uno Norte con Lautaro y Juan Antonio Ríos también se han detectado microbasurales, a pesar de la limpieza constante que se hace por parte de la Dimao", contó Muñoz.

Recursos

La Municipalidad de San Antonio gasta 104 millones de pesos mensuales en el retiro de la basura domiciliaria, operativos de limpieza (microbasurales) y contrato de bateas para el depósito de residuos voluminosos. Es por eso que la directora de la Dimao recalcó el llamado a la comunidad a mantener limpios los espacios públicos.

"Nosotros sacamos los microbasurales que están a la vista para que la ciudad se vea más limpia. Vamos un día, limpiamos y al otro ya hay basura de nuevo. Eso para quienes trabajamos en esto es súper frustrante porque queremos ver la ciudad limpia", señaló y luego añadió que "es cierto que es obligación del municipio mantener la limpieza de la ciudad, pero creo que como ciudadanos también tenemos el deber de ayudar en esto".

La Dimao ha cursado varias multas a quienes han sido sorprendidos depositando basura en sectores públicos. Para eso es necesario realizar la denuncia con pruebas concretas. Estas multas pueden llegar a ser de 1 ($ 47.396) a 5 UTM ($236.980).

-Cuando se hace un arreglo a la casa, ¿dónde se botan esos desechos y escombros?

-Como hoy el vertedero está muy limitado, nosotros le pedimos a la gente que nos llame antes de hacer algún arreglo en su casa para ponernos de acuerdo en cómo podríamos, en conjunto, botar esa basura. Esto porque entendemos que no hay un lugar específico donde hacerlo.

Como se ha sido informado por varios medios, el vertedero continúa funcionando, pero con una capacidad limitada, esto mientras se construye la segunda planta de trasvase. "Antes los camiones llegaban al vertedero e ingresaban para depositar la basura donde había capacidad, por ende no había tiempo de espera, pero ahora en la planta de trasvase no es así".

Como una forma de crear conciencia la Dimao realiza constantes talleres en las juntas de vecinos donde se les explica a los participantes la importancia de trabajar en conjunto y de hacer las denuncias respectivas.

"Sabemos que hay que sacar basura porque los desechos están, pero para eso tenemos el servicio de retiro domiciliario en todo San Antonio, el cual pasa tres veces por semana. El problema es que si el camión no pasa la gente tira la basura a la calle. También hemos puesto contenedores, aunque por el tiempo y por su mal uso se han ido rompiendo", indica Ernig.

Asimismo contó que en las calles centrales el camión recolector pasa todos los días y que en otras arterias se realizan barridos, pero aun así, los esfuerzos no son suficientes. "Hoy estamos a puertas de una licitación para poder aumentar los barridos en las calles y más operativos. También estamos adquiriendo bateas para instalarlas en distintos sectores de San Antonio los cuales serán centros de acopio de residuos voluminosos. Hemos puesto papeleros al lado de los paraderos, pero igual hay gente que bota los papeles al suelo. En las noches vemos a personas transitando por Barros Luco con sus perritos y no se hacen cargo de las fecas de sus mascotas. En las plazas destruyen los juegos...", recalcó la directora de la Dimao.