David Muñoz Castillo

Nicolás Leiva (24) hizo una confesión. "Cuando pensé en hacer una clínica de arqueros con 20 que llegaran estaba contento". Sus expectativas fueron ampliamente superadas, porque ayer la iniciativa gratuita que el ex meta de Huracán y Unión Santo Domingo desarrolló en las canchas sintéticas de la calle México convocó a una gran cantidad de porteros.

Más de 40 guardametas, incluso de otras ciudades, como Santiago, llegaron al recinto llolleíno para aprender un verdadero profesional del arco. El "Nico" forma parte del staff de las series menores de Everton y también trabajó con la Sub 19 y el primer equipo de los "ruleteros".

Los 44 arqueros que llegaron son para el barranquino "una motivación para seguir, para que esto se masifique en San Antonio. Es preferible que los niños hagan deporte en vez de estar en la casa jugando Play y no sean sedentarios", justificó su determinación.

La convocatoria fue diversa. "Habían niños, adultos hasta una niña, que tenía 22 años . Eso me llamó la atención. Niños de 7 años hasta adultos de 32 ó 34 años", especificó el entrenador de arqueros titulado en el Instituto Nacional del Fútbol, Inaf.

El trabajo específico que realizó Nicolás Leiva, y que no tuvo ningún costo para los asistentes, es una señal para el arquero. "Faltan iniciativas y esto es un llamado a la gente que trabaja en el deporte que no se debe lucrar con esta actividad. Las municipalidades deberían darse cuenta que pueden hacer cosas con el deporte. Es preferible que un niño de 15 años esté haciendo deporte que parado en la esquina haciendo cualquier cosa", analizó el preparador de arqueros de Everton.

Solo con un recinto para entrenar y la ayuda de dos personas, Nicolás Leiva realizó esta clínica. "Cuando tenga el tiempo, haré otra. Es algo tan fácil y es una ayuda para la comunidad", aseveró el entrenador, que entregó unas horas de sus vacaciones para enseñar los secretos del arco.

Fue uno de los últimos que abandonó las canchas sintéticas de Huracán y era uno de los más entusiastas. Ignacio Soto (12) viajó desde Santiago para participar de la clínica de Nicolás Leiva. "El profesor iba a la filial de Huachipato en Maipú. Ahí lo conocí y mantuvimos el contacto después que se fue. Cuando supe de esta clínica quise venir para entrenar y ser mejor como arquero", contó este fanático de Claudio Bravo. El "Nacho" tiene claro que cuando grande quiere "ser arquero profesional" y también que con trabajo puede conseguir su objetivo. "Antes era más malo, pero empecé a entrenar y he mejorado". Por eso vino desde Santiago para participar de esta iniciativa gratuita que el "Nico" desarrolló ayer en el recinto de Huracán. "Aunque igual fue un viaje largo, de una hora, quise venir. Aproveché las vacaciones para entrenar más. Ojalá hagan una próxima clínica para venir y entrenar más", aseguró convencido este pequeño que sueña con defender el pórtico de un equipo profesional en el futuro.