La lesión de Claudio Bravo es una prueba más de la resiliencia permanente que deben tener los deportistas de alto rendimiento, que día a día entregan todo su esfuerzo por ser mejores y, como dice el popular dicho, "dejar todo en la cancha".
Si bien uno de nuestros mayores ídolos estará al menos seis meses fuera de juego, esto es un ejemplo más de la fuerza física y mental que deben tener para enfrentar obstáculos complejos y superarlos.
La rotura del tendón de Aquiles es compleja, y una lesión que no sólo ocurre en deportistas profesionales, también le sucede a quienes, incluso, no han practicado actividad deportiva. En términos de rehabilitación, sin duda la importancia del equipo médico - kinésico es fundamental, pero igual de importante es la fuerza y empeño con que se superan estas lesiones. En este caso, estoy seguro de que Claudio nos demostrará a todos por qué es uno de los mejores arqueros del mundo.
Dr. Manuel Pellegrini
Traumatólogo
Clínica Universidad de los Andes