Rodrigo Ogalde
Una protesta que al menos duró dos horas, protagonizaron ayer los pescadores de la Boca del Río Maipo. Al borde de la playa de Llolleo y dentro del llamado "Nodo Logístico", aparcadero de camiones administrado por la Empresa Portuaria San Antonio, los manifestantes prendieron barricadas y quemaron las casetas de los guardias a cargo de vigilar el recinto.
"El motivo de la protesta es el malestar que tenemos como sindicato, desde el año 2011 que tenemos puesta una demanda por este molo (enrocado) y no tenemos respuesta del puerto, que hizo este molo afectándonos a nosotros como caleta y como pueblo", dijo a Diario El Líder, el secretario del sindicato de los pescadores "boquinos", Héctor Cardemil.
El dirigente afirmó que dicho enrocado dificulta el acceso expedito de los pescadores a la playa, lo que les imposibilitaría extraer sus recursos con la tradicional técnica de la pesca chinchorro.
En medio de la protesta, el presidente del mismo sindicato, Osvaldo Duarte, sostuvo que "esta es una advertencia al puerto de que si no dialoga en forma seria, nosotros vamos a tomar medidas más drásticas y nos tomaremos las calles en los accesos al puerto".
En un comunicado público, dicha organización sindical recalcó que hace 8 años "el gobierno central decretó entregar el borde costero sur de nuestra ciudad a la industria portuaria". Alegan que "Epsa ha destruido la playa y el normal desarrollo de nuestras actividades pesqueras".
Y aunque reconocieron que han sostenido conversaciones con ejecutivos de la Empresa Portuaria de San Antonio para abordar estos temas, los timoneles insistieron en que no han tenido respuestas a sus demandas que -aclararon- no son, necesariamente, compensaciones económicas. Por lo mismo, anunciaron que demandarán a la empresa estatal ante la justicia.
La manifestación se disolvió cuando hasta el lugar llegó el jefe de Secpla del municipio local, Christian Ovalle, quien dialogó con los representantes del sindicato y se comprometió a generar una reunión con el alcalde Omar Vera y los ejecutivos de la empresa portuaria.
Ovalle explicó a nuestro diario que la idea es que los dirigentes del sindicato se entrevisten con el edil con el fin de conformar una mesa de diálogo junto a la portuaria estatal.
El jefe de Secpla admitió que los pescadores de la Boca del Río Maipo sufren con la escasez de recursos y que, por lo mismo, el municipio está dispuesto a tomar medidas para ir en su ayuda. Sin embargo, sobre la forma en que se desarrolló la protesta sostuvo que "me ha sorprendido la violencia de las acciones".
Aboga por el diálogo
La gobernadora provincial de San Antonio, Gabriela Alcalde, hizo un llamado al diálogo y también rechazó la participación de encapuchados en la protesta.
"El diálogo es la vía correcta para alcanzar los acuerdos. Las acciones de violencia y amedrentamiento hacia otros trabajadores no son el camino correcto. Creemos que es fundamental que la ciudadanía se manifieste pero no con agresividad, sin mostrar la cara y poniendo en riesgo el trabajo de nuestra gente. Creo que la invitación siempre es a buscar consensos, a buscar las mejores alternativas", aseveró la gobernadora.
Gabriela Alcalde añadió que "los dirigentes de la pesca local siempre se han caracterizado por el respeto y el diálogo abierto y franco, por lo cual estoy segura que los encapuchados no les representan y lamentablemente opacan sus demandas".
De la misma forma, la gobernadora provincial advirtió que "se va a revisar en detalle la participación de los encapuchados y resguardar el orden público como la ley lo mandata".