Matías Muñoz, el joven que sigue la herencia de "Fotos Manzo"
El nieto del conocido fotógrafo sanantonino Juan Manzo, heredó la pasión de su abuelito y a los 21 años egresó como fotógrafo profesional y su gran sueño es ir a estudiar un magíster a España.
El conocido fotógrafo sanantonino Juan Manzo, popularmente llamado por todos como "Fotos Manzo", siempre tenía un problema para las fiestas familiares. Pocas veces salía retratado en las instantáneas, ya que nadie más sabía sacar fotos.
Hasta que su nieto Matías Felipe Muñoz Manzo, a la edad de 8 años, comenzó lentamente a interesarse en la fotografía. Siguiendo los pasos de su abuelo, no tuvo miedo en enfrentarse a la cámara y disparar durante las fiestas familiares para que "Fotos Manzo" quedara en alguno de los recuerdos.
"Yo era chico y me acuerdo que esa era la única forma para que mi abuelita saliera en las fotos de cumpleaños o Navidad. Él me dejaba usar la cámara y también me enseñaba a manipular los rollos, y así fue que me comenzó a gustar todo lo que tenía que ver con la fotografía", recuerda Matías Muñoz, quien comenzó a acompañar a su abuelo Juan a la edad de 12 años, asistiendo a los eventos en los que contrataban los servicios profesionales de "Fotos Manzo".
"Era su ayudante, y las mismas fotos que él sacaba yo las hacía con otra cámara que me pasaba y así podíamos tener un respaldo en caso de que alguna imagen saliera mala al revelarse. Pese a que era chico me gustaba trabajar en matrimonios, o eventos que se hacían hasta bien tarde. Me acuerdo que había días en que llegaba a las nueve de la mañana a la casa después de alguna fiesta de matrimonio", hace memoria el joven sanantonino.
El mejor regalo
Hasta que para la Navidad de 2013, Matías Muñoz Manzo recibió el regalo más esperado y que comenzaría a marcar un antes y un después dentro de sus proyecciones en la fotografía.
"Para esa Navidad me regalaron una cámara Canon 60D. Yo había trabajado harto en diferentes cosas para juntar para tener mi propia cámara, por lo que pagué una parte y lo demás fue un regalo de mi familia. Esa sin duda es la mejor Navidad que he tenido", reconoce Muñoz, quien recibió aquel obsequio cuando tenía 15 años de edad.
Con cámara en mano, Matías Muñoz comenzó a recorrer los diferentes rincones del Litoral Central. "Cuando ayudaba trabajando a mi abuelito, las cámaras se usaban solo para el evento al que íbamos, por lo que en la semana estaban guardadas, así que tenía que esperar para poder fotografiar. Pero ahora que tenía la cámara para hacer otras cosas, así que me iba a sacar fotos al Parque El Trigal, por Llolleo, a veces iba a El Convento. Y también empecé a sacarles fotos a mis amigos, para ir aprendiendo a realizar retratos. Y también conté con la ayuda de mi tía Carolina Manzo, quien además me regaló un curso por internet de fotografía que me ayudó harto para seguir aprendiendo técnicas", asegura.
Sin embargo, cuando Matías Muñoz Manzo egresó de cuarto medio del colegio Fénix, no siguió el camino de la fotografía, sino que postuló para ingresar a las filas de la Fuerza Aérea de Chile.
"Quería ingresar a la Escuela de Aviación, así que postulé a finales de 2014 cuando iba a salir de cuarto medio. Pero finalmente no quedé y me tomé el 2015 como año sabático en los estudios, por lo que estuve trabajando", explica.
A estudiar a santiago
Pero el 2016, le hizo caso a su pasión por las cámaras y postuló a la escuela de Foto Arte Chile que se encuentra en Santiago en la comuna de Providencia.
"Antes de entrar me hicieron una entrevista para saber si tenía o no condiciones para estudiar fotografía. Además llevé algunos de mis trabajos y eso ayudó para que vieran en la escuela que ya manejaba técnicas y conceptos que me servirían para la carrera", dice Matías, quien tras dos años y medio de estudios y pruebas, pudo egresar el viernes pasado, por lo que ahora solamente le queda presentar el próximo años su portafolio final y convertirse en fotógrafo profesional.
"Estuve viajando desde San Antonio a Santiago el primer año y medio, y después pude vivir en la capital mientras terminaba la carrera de fotografía. Aprendí mucho en la escuela, fue una gran experiencia para reafirmar lo que ya venía haciendo desde chico. Me di cuenta además que me gusta mucho hacer retratos y fotografías de animales", añade.
Mirando a España
Aprovechando que su tía Carolina Manzo vive actualmente en la ciudad española de Valencia, el año pasado Matías juntó dinero y compró pasajes para recorrer durante un mes algunas ciudades de España y otros países europeos.
"Viajé en septiembre del año pasado y estuve un mes y medio en Europa. Pude conocer Valencia, Barcelona, Madrid, Ponferrada, e ir además a Francia y estar en París. Tuve la oportunidad de sacar muchas fotos, ya que gracias al carnet de estudiante de la escuela tuve acceso liberado a varios puntos. Lo que más me gustó de allá, es que hay mucho respeto por los fotógrafos y siempre dan facilidades para poder sacar fotos", detalla el joven oriundo de la población 30 de Marzo, donde vive junto a su madre Paola Manzo y su hermano Félix.
Fue justamente el viaje a España el que le entregó una nueva motivación al sanantonino que actualmente tiene 21 años de edad (19 de mayo 1997). "Fue un viaje que me cambió la mirada en varias cosas. Me encantaría estudiar un magíster de fotografía profesional en España, así que tengo eso como objetivo. Y además complementarme de más equipamientos y seguir trabajando en fotografía, que es en lo que me proyecto de aquí para adelante", asevera Matías Muñoz.
-¿Cómo fue trabajar con tu abuelito Juan Manzo?
-Me gustaba harto porque aprendía mucho y me enseñaba técnicas cuando era bien chico. Y ahora que he podido estudiar soy yo él que le enseña lo que he aprendido, así que se invirtieron los papeles (dice entre risas).