Mónica Jorquera Escobar
Una discusión que se salió de control, habiendo alcohol de por medio, le costó caro a un garzón de Cartagena.
El Tribunal Oral en Lo Penal de San Antonio condenó al mesero Francisco Morales Aguilera (31) a pasar 12 años en la cárcel como autor del delito de homicidio.
Los jueces establecieron, tras el juicio que terminó el lunes pasado, que Morales Aguilera le enterró un cuchillo carnicero de 18 centímetros en el pecho a su compañero de trabajo Ricardo Espinoza Tabilo (32), provocándole la muerte.
El hecho ocurrió, según testificaron en el juicio, durante la fiesta de cumpleaños número 28 de Francisco Morales, en la cual éste insultó groseramente a una de sus invitadas y la golpeó.
Esto provocó que Ricardo Espinoza defendiera a la mujer. Comenzó así una pelea que culminó cuando el condenado tomó el arma blanca y apuñaló a la víctima fatal, quien murió desangrado.
"No reuniendo los requisitos, la pena impuesta deberá cumplirla de manera efectiva", leyó ayer la jueza redactora, Olga Fuentes, en la audiencia de lectura de sentencia.
Sirvió de abono a la pena los tres años que Francisco Morales Aguilera ha pasado en prisión preventiva, puesto que fue detenido el mismo día del crimen, el 22 de noviembre de 2015, en Cartagena, donde ocurrió el crimen.
El fiscal a cargo del caso, Fred Silva, explicó que los jueces consideraron la extensión del mal causado. "Acá hubo (con la muerte de Espinoza) un gran mal para la familia. Tenemos informes profesionales tanto del hijo de la víctima y de su mujer que lo demostraron", expresó el persecutor.
Esto porque el occiso era padre de un niño que tenía 12 años al momento del crimen, quien se mantiene hasta hoy con tratamiento sicológico.
En el juicio la viuda dijo llorando en el estrado que "cambió toda mi vida. Este hombre (condenado) mató a quien era todo para mí, me quitó todo lo que yo tenía, me destruyó la vida".
La abogada defensora de Morales, Isabel Rodríguez, tiene un plazo de diez para presentar un recurso de nulidad ante la Corte de Apelaciones.
22 de noviembre de 2015 ocurrió el homicidio en la población José Arellano de Cartagena.
32 años tenía la víctima fatal, Ricardo Espinoza, que también era garzón en Cartagena.