Madre de murguera trans inicia campaña de ayuda a postrados
Tras la muerte de la conocida Alejandra Pradón, su progenitora extendió un llamado a no llevarle flores al cementerio, sino a dar aportes para personas enfermas que necesitan colaboración.
La tristeza y la rabia no se alejan de Gisela Echavarría tras la muerte de su hijo Cristián Alejandro Luco, quien fue conocido y querido como la alegre transexual "Alejandra Pradón", reina de belleza del Carnaval de Murgas y Comparsas de San Antonio y decenas de eventos.
Luco dejó de existir la tarde del miércoles 31 de octubre en el hospital San José de Melipilla aquejado de una grave neumonía.
Pese al dolor irreparable por la muerte de su hijo Gisela Echeverría inició una campaña para ayudar a los enfermos postrados.
Desde que estaba en el velorio de su hijo ella llamó a sus contactos a no llevarle flores a la tumba, sino a colaborar con pañales de adultos, toallas húmedas, sabanillas y apósitos, puesto que es lo que más requieren los pacientes que ella quiere apoyar.
"Antes de que la Alejandra empeorara, Marcelo Moya, el presidente de Prevención Viña (Centro de Apoyo a la Salud), me había propuesto que hiciéramos algo acá en San Antonio. Nosotros ya habíamos pertenecido a dos grupos para ayudar a otras personas y esa era la idea: hacer algo para quienes más lo necesitan", comentó Gisela.
Con mucha tristeza indicó que después de la muerte de su hijo fue dura e injustamente criticada y discriminada por algunas personas de la feria donde trabaja.
"Nunca pedí ayuda a nadie y traté de salir adelante sola con mi hijo. A la municipalidad le pedimos permiso para tener este puesto en la feria, para que ella tuviera una forma de mantenerse activa a mi lado y no dejarla sola en la casa. La idea era no postrarla más", comentó.
De acuerdo a lo señalado por Gisela, luego de esperan los trámites para sacar la personalidad jurídica de la agrupación y pasar algunas semanas de duelo, van a comenzar a trabajar como "Prevención Viña". "Lo más probable es que trabajemos con ellos y nos llamemos Prevención Viña San Antonio", señaló.
"La gente que pueda donar o que quiera participar en esto me pueden ubicar en la feria de jueves a domingo", dijo la madre.
Rabia
Por otra parte, Gisela no puede dejar de mencionar la rabia y frustración que siente por lo mal que, según ella, trataron a su hijo en el hospital Van Buren de Valparaíso.
"Yo voy a hacer una demanda contra la enfermera, porque le robaron hasta la silla de ruedas a mi hijo y se la pasaron a otra persona. Después, cuando mi hijo quiso levantarse, le pasaron otra, pero la Alejandra se había comprado esa silla con su plata".
Lo que más lamenta Gisela es que su hijo le contó que sufrió mucho por cómo lo trataron en el hospital, y que a ella no la dejaron visitarlo. "Él me dijo que estaba aburrido que lo trataran mal y que no se arrancó. Aquí la única verdad es que a mi hijo me lo abandonaron en el hospital, porque ni siquiera lo mudaban y más encima después lo botaron a la calle".
"El dolor más grande que tengo es que me privaron del derecho que tenía como madre de ver a mi hijo antes de morir", finalizó entre lágrimas.