David Muñoz Castillo
Extendió su reinado. No contento con conquistar el estado de Sao Paulo, un sanantonino ahora se declara el rey de Brasil. Así es, porque el barranquino Felipe Parra Jardim (28) ganó el Campeonato Brasileño de Muay Thai. Para lograr la victoria derramó sangre sobre el cuadrilátero levantado en el gimnasio Mané Garrincha de Sao Paulo y terminó con su mano izquierda fracturada, pero nada de eso importó. Quería el triunfo y llegar a la cúspide del boxeo tailandés de ese país.
En octubre este verdadero guerrero, que tiene sus orígenes en la población Movilizadores Portuarios, de donde es originario su padre -su madre es brasileña-, consiguió el cetro paulista. No conforme con aquello se planteó nuevos objetivos y los consiguió. Por decisión unánime de los jueces, tras tres feroces rounds, el sanantonino que hace 15 años vive en Bragança Paulista -un municipio de Sao Paulo, consiguió este nuevo triunfo que estira su registro de peleas a 51 triunfos y un empate en 58 confrontaciones.
Después del evento organizado por la Confederación Brasileña de Muay Thai, al día siguiente, y ratificando su verdadera condición de luchador se fue a su academia, y a pesar de las heridas de su combate, peleó seis asaltos más para conseguir su cinturón negro en su escuela Inside.
"Este fue un año muy importante de crecimiento profesional y personal, un año donde logré mis objetivos como luchador y ahora me voy a "arreglar" para los próximos desafíos y para el año 2019, que trae muchas cosas buenas", resumió desde Sao Paulo, luego de una sesión con el fisioterapeuta, donde lo ayudaron a reconstruir su golpeada humanidad.
Preparación
Después de conseguir el título paulista en octubre, Felipe Parra se enfocó en el Campeonato Brasileño de Muay Thai.
"La preparación fue muy importante porque bajé mucho de peso, ya que estaba acostumbrado a luchar en los pesos pesados, en 85 hasta 90 kilos y en este torneo luché en los medios, hasta los 80 kilos", relató.
Entrenamiento, una dieta estricta y mucha disciplina marcaron la antesala de su participación en el torneo. Como su objetivo era ganar el título brasileño se preparó para afrontar hasta cinco combates, "porque no sabía cuántos eran los inscritos. Anunciaban la cantidad un día antes; entonces, me preparé para hacer cinco luchas", explicó.
Dos combates
Luego de su intensa preparación Felipe llegó al recinto paulista para disputar el torneo nacional.
Su arranque fue arrollador.
"La primera lucha que hice fue contra Paulo Tozetti del equipo Vidal Team del estado Paraenense. Es una escuela profesional de Paraná. Fue una lucha buena donde conseguí por mi juego de lucha la victoria en el segundo round. Le pegué con la rodilla y logré un nocaut. Salí bien porque no me pegó y me sentía fuerte", relató el sanantonino sobre su primer combate.
La gran cantidad de peleadores y de categorías en el certamen dilataron su segunda lucha, donde estaba en juego el título.
"La final demoró mucho, peleé con Paulo como a la una de la tarde y fui a enfrentar la final más o menos a la medianoche. Esperé casi todo el día".
La ansiedad se acumuló en el representante del team Inside. Hasta que llegó el gran momento del combate más importante de la jornada.
"En la segunda peleé contra un atleta de un equipo tradicional de Salesopolis Sao Paulo, el ATS Tiburones, que tiene a algunos de sus integrantes peleando en la UFC (Ultimate Fighting Championship). Él se llama Cassiano da Silva, un atleta muy duro, joven, que compite en muchos campeonatos", agregó sobre la parte final de su participación.
Ambos se la jugaron por lograr el título brasileño de boxeo tailandés y Felipe recibió castigo, por eso definió su pelea como una "guerra, donde me quebró la nariz en los primeros rounds. Era una final y salimos a pegarnos fuerte. Me golpeó en la nariz, pero no sentí cuándo. Estaba tranquilo, hice mi juego. Gané el primer round, el segundo también y vencí por decisión unánime de los jueces. Así salí campeón brasileño, en una lucha muy fuerte", contó sobre el logro obtenido en el gimnasio Mané Garrincha de Sao Paulo.
La trascendencia del triunfo de Felipe es enorme, porque la Confederación Brasileña de Muay Thay es una organización compuesta por tres federaciones y más de 30 academias a lo largo y ancho de todo el país.
"Este es un logro importante, porque esta federación hace muchos eventos durante el año, siempre busca a nuevos luchadores para sus eventos, que son pasados por canales televisivos", explicó Felipe.
Nuevos objetivos
Felipe Parra consiguió su objetivo: el título brasileño de muay thai, pero no se duerme en los laureles y ya se propone nuevas metas..
"Fue muy bueno ganar el Paulista, un chileno logrando un torneo en un estado que tiene más de 18 millones de personas, más que nuestro país. Tenía este sueño de ir a buscar el nacional en un país con más de 200 millones de personas, en una federación de alto respeto".
Y los sueños del sanantonino ahora van más allá de las fronteras de Brasil. El Panamericano de México del 2019 está en su horizonte. "Quiero ganar torneos más difíciles, con luchadores más complicados. Para eso trabajaré, para estar mejor", anunció.
Para eso se prepara, incluso ya tiene desafíos inmediatos. No para de entrenar, a pesar de los golpes recibidos y está a punto de cerrar un combate de artes marciales mixtas (MMA) en el mes de febrero.
Graduación
Después de sus combates en el campeonato brasileño, el sanantonino se fue a su academia paulista para cumplir con otro paso en su carrera.
"El Nacional fue el sábado y el domingo tuvimos un examen de graduación para los cinturones negros para cambio de color. Me faltaba mi graduación final", precisó el deportista que representa a Chile y San Antonio.
Y agregó que "luché seis rounds, después de pelear el día anterior en el Brasileño y ganarlo. Quedé con la mano izquierda y la nariz quebrada e hice seis rounds más el domingo para buscar mi cinturón negro de muay thai. Lo logré con éxito y, este sin duda, es el título más importante de mi vida, de mi carrera".
Munil Adriano, su maestro, lo inició hace 18 años en el camino del muay thai y Felipe dio un importante paso en esta exitosa trayectoria. "Me da mucha alegría, ser parte de esta familia y de este equipo que se llama Inside", valoró desde Sao Paulo el nuevo monarca brasileño de boxeo tailandés, un sanantonino que conquistó ese país a punta de golpes.