Locura total por los Duendes Mágicos, los favoritos de los niños en esta Navidad
Los 600 peluches que llegaron ayer a la tienda París se agotaron en un par de horas debido a que los consumidores hicieron filas desde temprano para no quedar sin este apetecido regalo navideño.
Una locura total se vivió ayer en el mall Arauco San Antonio debido a que a primera hora de la mañana se esperaba la llegada de 600 unidades de los Duendes Mágicos, el juguete de moda en esta Navidad.
Decenas de personas se agolparon desde temprano afuera de la tienda París, en donde los trabajadores repartieron números de atención para hacer el proceso más ordenado y "justo", como lo mencionó personal de la tienda. En pocas horas, los consumidores arrasaron con los duendes.
La locura
Ninguno de los adultos parece entender claramente de qué se trata esta vorágine de los Duendes Mágicos, pero se han transformado en el típico caso de la película "El regalo prometido", donde no importa cuál sea el sacrificio, porque lo que piden los niños debe estar sí o sí bajo el árbol la noche del 24 de diciembre.
Tratando de entender por qué había una fila tan larga, Diario El Líder consultó a algunos de los compradores que estaban la mañana de ayer esperando su turno.
Maribel Gutiérrez es abuela de cinco nietos y se las ha ingeniado para que a ninguno le falte su juguete de moda en esta Navidad. La última vez que los peluches arribaron a San Antonio ella también estuvo ahí. "Ahora por lo menos está más ordenado, nos tienen con número, porque antes la gente compraba en demasiadas cantidades para revenderlos. Están entrando de a 20 personas, y vendiendo de a dos por persona. Hicieron esto para limitar un poco y que todos toquen".
Desde la tienda indicaron que no estaban autorizados para dar una declaración formal, sin embargo, un funcionario informó que "todo lo que hicimos hoy (ayer) fue por el bien de nuestros clientes. Tenemos pocas unidades y queremos que todos se lleven un duende, sin mayores problemas".
Especiales
Maribel Gutiérrez dio algunas luces del porqué son tan solicitados estos peluches. "Por ejemplo, uno le dice a los niños que el duende les pinta la cara, y ellos se lo creen. Por eso es tanta la emoción de los niños por tener un duende, por las historias que vienen con el cuento".
Sabina Palma ya no sabe cómo explicarle a su pequeño retoño que los duendes no tienen magia en realidad. "Uno de mis hijos salió con que uno de sus compañeros le dijo que a su abuelita, el duende le había dado un saco de papas, y el otro que la abuelita le había pedido una casa y no sé qué, y mi hijo era el único de su curso que no tenía el duende. No me quedará otra que contarle la verdad para que entienda que no son mágicos. A lo mejor podría fantasear con que el mono se cambió de lado, pero que te traiga una casa es mucho. Creo que depende de uno llevarlo por ese lado. Hay que enseñarles, tal vez, que son encantadores porque te dan amor o porque puedes jugar con ellos".
Alejandro Arévalo los estaba comprando para su sobrina, y entiende que estos muñecos generan el mismo furor que tuvieron en su momento los "Furby" o las "Monster High", que también pusieron de cabeza a los papás buscando el regalo ideal para sus hijos. "La sensación que causan los duendes en los niños no me la puedo explicar. Creo que más que nada es por moda e influye mucho el consumismo de las personas".
Desde la tienda informaron que lo más seguro es que no lleguen estos muñecos nuevamente a San Antonio.