El cáncer se llevó la vida de una joven funcionaria del hospital Claudio Vicuña
Elizabeth Silva (28), luchó por cuatro años contra la enfermedad.
Sus últimos meses de vida se llenaron de gran dolor físico y de trágicas penas en el alma. Postrada en cama desde septiembre pasado, Elizabeth Silva Pizarro enfrentó con poderosa convicción el cáncer mamario que en 2014 le descubrieron los médicos.
Para esta joven técnico en enfermería del hospital Claudio Vicuña, su enfermedad no fue impedimento para que luchara por ganar un poco de más tiempo en este mundo y también dejarles un legado a las mujeres que pueden sufrir este mal.
Pero la desdicha, el horror del destino, le dio en forma consecutiva, duros golpes a ella y su familia. En 2007, falleció su hermano Víctor. Este año, el 2 de septiembre, murió su abuela Emilia Tejo. Y hace poco menos de dos meses, el 8 de noviembre, un infarto cardiaco mató a su padre Fernando Silva.
La noche del pasado viernes, a las 21.13 horas, el deceso de Elizabeth llevó, nuevamente, a sus seres queridos a posarse en las tierras de la desgracia.
Sus restos son velados en su domicilio de calle Borde Río 544, en la Villa Puerta Sol, del sector alto de Bellavista. La entrada a la residencia lucía ayer cubierta de globos blancos y rosados. Sobre el féretro, instalado en el living del hogar, había un rosario también rosado. Elizabeth parece haberse marchado con la certeza de que hizo todo lo que más pudo por ella y por sus familiares.
Olga Pizarro Tejo, mamá de esta joven de 28 años, recordó que apenas tenía 23 cuando le diagnosticaron el cáncer de mamas, que pronto se empezó a ramificar por su cuerpo.
La madre admite que este ha sido un año terrible y ella ni siquiera sabe de dónde sale la fuerza para resistir. Reconoce que su marido se había volcado tanto a preocuparse de la salud de su hija que poco a poco se fue apagando.
El fallecimiento de su padre provocó en Elizabeth una gran desazón. Ella, que enrostró a la muerte con absoluta firmeza, vio cómo su energía se acababa. "Fue impactante todo, ella sufrió mucho con la enfermedad, fue terrible, el cáncer fue muy cruel con ella", reveló Olga.
Aunque no tuvo hijos, Elizabeth se transformó en la segunda mamá de su sobrina Monserrat, una adolescente de 13 años que es hija de Víctor Silva, su hermano fallecido en 2007.
Monserrat y Elizabeth eran muy cercanas y vivían junto a Olga y Fernando. Ahora la casa quedó más vacía con la partida de ella y su papá. "Ella me cuidaba mucho. Y aunque estaba mal, luchó hasta el final. Para mí ella significó mucho y la recordaré por su alegría", contó la pequeña
La madre de Elizabeth quiso agradecer a todas las personas que "nunca abandonaron" a su hija como su amiga Paula Fierro, a sus compañeros del Servicio de Urgencia del hospital Claudio Vicuña, a las enfermeras del Policlínico de Alivio del Dolor, al doctor Víctor Vásquez (de la Corporación Entereza) y tantos otros.
El funeral de Elizabeth se llevará a cabo hoy a las 16 horas después de una misa que se oficiará en la Parroquia de San Antonio.
"A mi hija le preocupaba que mi nieta Monserrat y yo nos fueramos a quedar solas si ella moría".
Olga Pizarro."