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Fiscal jefe explicó por qué cerró la causa

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Sobre la decisión de no perseverar en la causa de Tecnorec, el fiscal jefe de San Antonio, Osvaldo Ossandón, explicó que los resultados de la investigación determinaron que "no había antecedentes suficientes para fundar una acusación en contra de este sujeto (al dueño de la firma) por los tipos penales que los querellantes indicaban".

Ossandón recalcó que él mismo revisó minuciosamente la carpeta investigativa y, por eso, se determinó cerrar la causa sin formalizar y sin acusar a ninguna persona.

El jefe del Ministerio Público de San Antonio recordó que hubo sanciones administrativas contra la empresa Tecnorec, lo que implicó su clausura total. Sin embargo, insistió en que penalmente no pudo configurarse un escenario que permitiera imputar cargos.

Agregó que "para formalizar estamos obligados a tener claridad sobre el tipo penal, esa es una obligación legal de la fiscalía, no porque haya habido una querella estamos obligados a formalizar, tenemos prohibición legal de formalizar sin antecedentes".

Además, Ossandón dijo que los abogados querellantes tienen derecho a recurrir con un reclamo en contra suya. "El caso está cerrado por nosotros y si es que administrativamente hay algún tipo de modificación, obviamente que se tomarán las medidas, así es el procedimiento oficial".

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osvaldo ossandón.
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Reclaman contra la Fiscalía por cerrar la causa judicial de Tecnorec sin formalizados

Abogado querellante, que representa a las familias afectadas, no descartó presentar una queja contra el fiscal jefe de San Antonio.
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Rodrigo Ogalde

El pasado jueves 7 de marzo se llevó a cabo la audiencia en la que la jueza del Tribunal de Garantía de San Antonio, Leticia Morales, acogió la solicitud del Ministerio Público de no perseverar en la investigación del caso que implicaba a los dueños de la empresa Tecnorec, que reciclaba baterías en Agua Buena y que fue clausurada en 2015 por la contaminación con plomo que afectó a algunos de sus trabajadores y también a niños de dicho sector.

Así, el tribunal sanantonino se pronunció sobre la petición que hizo el fiscal Rolando Ramos a nombre del Ministerio Público, que argumentó que no se lograron reunir los antecedentes que permitieran imputar delitos a uno de los representantes de la desaparecida compañía. Esto, porque existía una querella interpuesta por un grupo de familias de Agua Buena, en 2016, que sindicaba a Ramón Bulnes como supuesto autor de cuasidelito de lesiones graves y otros delitos medioambientales.

La causa, en la que nunca se formalizó a nadie, quedó, de esa manera, cerrada para el Ministerio Público.

En la audiencia, el abogado del estudio AES, Matías Robertson, alegó ante la magistrada Morales por la decisión de la fiscalía y lamentó que después de tres años se haya llevado adelante una investigación sin formalizar a sujeto alguno. Sin embargo, la misma jueza aclaró que el tribunal no puede obligar al Ministerio Público a imputar cargos a ninguna persona.

Acciones

El abogado Matías Robertson explicó que "la querella que presentamos en 2016, lamentablemente, ha sido tramitada por tres fiscales jefe de San Antonio, los cuales de oficio no hicieron ninguna gestión; todas las gestiones en la etapa investigativa, en una causa desformalizada, se hicieron a requerimiento de nuestra parte".

Robertson agregó que se le había solicitado a la fiscalía local que ordenara a la Brigada Investigadora de Delitos Medioambientales (Bridema) "realizar análisis periciales respecto de la contaminación de plomo que existe en ese lugar. Estos demoraron en llegar, pero las conclusiones de ese informe son abrumadoras, ya que dan cuenta de la presencia de residuos de plomo a tal punto que todo el sector de Agua Buena está consumiendo agua que aún tiene rastros de plomo, la contaminación llegó hasta el nivel de las napas subterráneas".

El abogado recalcó que en la querella se acusa a algunos organismos del Estado "que tenían la obligación de fiscalizar" pero que, a su juicio, permitían que Tecnorec siguiera operando "pese a que ya estaban sancionados por la entidad administrativa regulatoria".

En este caso, a su juicio, la responsabilidad de las instituciones del Estado pudo haber sido tardía, negligente o imprudente.

Robertson, que representa a 100 familias de Agua Buena, advirtió que, antes de decidir no perseverar en la causa, el Ministerio Público debió haber cerrado la investigación formalizada.

"Si el tribunal acogió la solicitud de no perseverar, los querellantes tenemos los brazos atados, procesalmente no tenemos ninguna herramienta", alegó.

Para intentar revertir este panorama, AES abogados presentará nuevos antecedentes de la causa ante la fiscalía y, en paralelo, Matías Robertson evaluará presentar una queja formal "en contra del actuar del fiscal jefe de San Antonio" (Osvaldo Ossandón) ante la Fiscalía Regional de Valparaíso. Argumentó "que puede configurarse una manifiesta falta de servicio por parte del Estado, a través de la fiscalía, en orden a no querer investigar hechos constitutivos de delitos, teniendo, a lo menos, antecedentes fundantes".

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la planta de tecnorec fue clausurada en 2015 por el tribunal ambiental.
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Una madre que pide justicia

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Junto al abogado Juan Ignacio Alvarez, del estudio AES Abogados, la vecina de Agua Buena Carla Díaz reclamó por lo que ambos consideran los nulos avances que hubo en la investigación de la fiscalía en el caso de la querella contra Tecnorec.

Ella, que es madre de dos niños que sufrieron contaminación con plomo porque viven muy cerca de donde estaba la planta, contó a Diario El Líder que ambos aún mantienen los efectos negativos en su organismo debido a la presencia de dicho elemento.

"Después que salen los informes de que estábamos contaminados, al año mis dos hijos empezaron a presentar problemas, sobre todo Cristofer, que tiene un problema en su rodilla y estuvo casi todo un año fuera del colegio por lo mismo".

Díaz reveló que sus hijos llegaron a tener altos niveles de plomo en la sangre, lejos de los estándares permitidos a nivel nacional e internacional. Añadió que eso sigue hasta hoy pero en niveles más bajos.

"El deber de la autoridad es proteger la salud pública y bajo esa premisa, aquí se debió haber paralizado (la planta) con la primera fiscalización", declaró Álvarez.

"Pienso que no hay justicia", sostuvo Carla Díaz, quien culpó a las autoridades de la época (2008-2015) de no haber hecho algo antes para clausurar Tecnorec.

"Yo voy a llegar hasta el final con esto. La gente que no fiscalizó y la gente que provocó que mis hijos tengan esta enfermedad tienen que pagar con cárcel", sentenció.

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juan ignacio álvarez y carla díaz.
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