Prefecto de Carabineros dijo que el principal foco es atacar la delincuencia
El prefecto de San Antonio, teniente coronel Lincoyán Valenzuela, fue enfático en señalar que "si bien el comercio ambulante es materia de fiscalización nuestra y está dentro de nuestras obligaciones fiscalizarlo, en estos momentos no es nuestra primera prioridad".
Valenzuela recalcó que "nuestro principal norte está destinado a combatir los delitos que afectan a las personas como el robo con intimidación, robo con violencia o robos a los mismos domicilios, esa es nuestra primera prioridad: tratar de bajar esos índices".
El jefe policial subrayó que esto último no significa que el control al comercio ilegal "se vaya a descuidar".
Así también el prefecto de Carabineros de San Antonio destacó que los funcionarios realizan fiscalizaciones diarias a los vendedores ambulantes. "No podemos decir que estamos impedidos de operar, la verdad es que operamos muchas más veces que lo que se ve en esa instancia", resaltó al referirse al control efectuado, la tarde del miércoles, en el centro de San Antonio, y que fue divulgado en un video subido a las redes sociales por los propios vendedores ambulantes.
Agregó que la fiscalización a este tipo de comercio "genera conflicto porque la gente no quiere que se le incauten los productos".
Según la ordenanza, las multas por vender sin permiso o comprar en el comercio ilegal van desde de una a cinco UTM, lo que equivale a un máximo cercano a $241.000.