El barrendero de calles que llegó a ser concejal de su comuna
Fernando Cornejo supo sobreponerse a las carencias de la vida y con perseverancia fue cambiando su destino. Desde lo más abajo, este santodomingano, hijo de campesinos analfabetos, fue trepando en la escala social hasta convertirse en autoridad.
Hijo de campesinos analfabetos del sector de San Enrique, Fernando Cornejo es el menor de 17 hermanos. Su padre, Antonio Cornejo Cornejo, fue de los primeros ovejeros de Santo Domingo.
"Yo nací en el club de equitación que ahora es el camping de Carabineros de Santo Domingo. Entonces, sufrí lo que es tener un sólo par de zapatos al año, andaba a pie pelado para cuidar los zapatitos. Como ocurre en muchas familias, nos íbamos traspasando la ropa con los hermanos. Imagínate cómo llegaban los zapatos a mí que era el número 17. Mi papá nos llevaba a la escuela de primero a cuarto básico para que aprendiéramos a leer y a escribir. Luego nos sacaba para trabajar porque su mano de obra eran sus hijos. Yo le salí medio rebelde y quise seguir estudiando", recuerda este santodomingano de actuales 61 años.
Sus inicios
Para lograr este objetivo, Fernando Cornejo debía trabajar y, como tenía habilidades para el dibujo, se desempeñó en las publicidades de la época. "En Santo Domingo era el único que me dedicaba a la publicidad gráfica, cuando no había computadores y todo era manual. Empecé a ganar más plata que mi papa y pude pagar mis estudios. También ayudé a mis padres y les pude regalar el primer refrigerador, el primer televisor, la primera cocina a gas, entre otras cosas. Fui el único de los 17 hermanos que terminó sus estudios", cuenta orgulloso.
En ese entonces postuló al municipio de Santo Domingo cuando había alcaldes designados por las autoridades militares. Recuerda que no se le permitió entrar porque había formado parte de la Juventud Demócrata Cristiana y fue tildado de extremista. Luego lo intentó de nuevo y pudo ingresar a la municipalidad con el alcalde designado Sergio Cruz Fernández.
"En esa época todo era muy político y nos obligaban a desfilar para el 11 de septiembre. No lo decían abiertamente pero si no ibas a desfilar te descontaban el día. Por mi inclinación política tuve un traspié con el alcalde designado, quien quería que llamara a votar por el Sí en el plebiscito del '88. Me negué y como castigo me mandó a cargar camiones con arena a la playa y así estuve como un año. Luego me mandó a los camiones de basura y estuve tirando tarros de la mañana a la noche. Finalmente llegué a barrendero de las calles de Santo Domingo. En esa labor estuve como cinco o seis años", rememora.
En la década del '90 se fue a la dirección de salud del municipio y trabajó más de 20 años como conductor de la ambulancia, participando en los rescates y urgencias. Desde entonces ya manifestaba una vocación política en su labor de dirigente. "Fui directivo de la locomoción colectiva. Cuando entré a la salud, también fui activo dirigente sindical. Sin cobrar por mis gestiones, sólo por vocación. Era algo innato que me gustaba", narra sobre sus inicios en la política.
En 2012 postuló al cargo de concejal en Santo Domingo como independiente y le faltaron sólo 10 votos para salir elegido en primera instancia. Para la segunda campaña tuvo acercamientos con la derecha y la Democracia Cristiana. Al final se quedó con este último partido porque su sentir es cristiano y humanista.
"En la última elección (2016) me llevaron de candidato y quedé dentro de las primeras tres mayorías. En la campaña solo gasté 120.000 pesos. Reciclé letreros que tenía de la campaña anterior y con la devolución de votos gané plata. El cálculo era sacar 500 votos y los superé", explica.
La voz del Pueblo
A Fernando Cornejo nunca le gustó que las autoridades fueran lejanas a la gente y que sólo aparecieran cada cuatro años para solicitar el voto. "He tratado de ser un concejal cercano, yo no doy audiencia, hablo con los vecinos directamente en su casa. También converso con la gente en mi colectivo de la línea Llolleo Rocas, que trabajo esporádicamente. Las personas tenemos que hablar de igual a igual, es la falla que tienen las autoridades a nivel nacional, cuando los eligen se olvidan de la gente. Trato de hacer lo que a mí me hubiese gustado que hicieran conmigo las autoridades en su momento".
Añade que "uno se debe nutrir de la gente. Tengo la frase del 'Puma' Rodríguez como lema: hay que escuchar la voz del pueblo. El pueblo somos todos, salen buenas ideas de las personas. Harta gente me dice que postule nuevamente. Había pensado no ir porque lo que no me gusta es que la gente piensa que como concejal uno gana cualquier plata. Yo gano la mitad de lo que ganaba antes pero lo hago porque quería trabajar por esta comuna, que me ha dado todo".
Contra Cara
Como toda paradoja de la vida, este santodomingano tiene una historia de contrastes con su hermano Víctor, con quien comparte el origen humilde.
Más conocido como el "Pollo", este vagabundo de la comuna parque transita en harapos y pidiendo plata a las salidas de los supermercados para comprar alcohol. "Mi hermano tuvo una meningitis mal tratada que le afectó el cerebro. Tiene 65 años pero, según revisiones médicas, tiene una mente de un niño de cinco años. Además, es alcohólico, otra enfermedad que lo aqueja. Pero no es un delincuente. Se le arranca a mi hermana, quien lo cuida y le tiene comida y ropa limpia. Pero se le arranca a las 3 o 4 de la mañana", comenta resignado.
"De los hermanos yo soy el único que da la cara. Por eso quiero que se sepa la historia, hemos tratado de internarlo, estamos esperando hace dos años que el Servicio de Salud se haga cargo. El problema es que se pone agresivo, por eso hace poco pedí disculpas en redes sociales con una declaración pública. Es mi hermano, reconozco sus errores. A mí me duele porque sé que mi hermana le tiene todo, la gente no sabe que se le escapa, incluso le ha pegado", añade.
"La situación escapa de mis manos, no es fácil internar a una persona en el sistema público. La idea es desintoxicarlo, darle los remedios. Reitero una vez más mis sinceras disculpas por el actuar de mi hermano a todos y cada uno de los que se han visto afectado y les solicito un poco más de paciencia mientras logramos resolver este complejo panorama. Esta situación nos tiene muy complicados como familia", remata.
La adversidad
Pese a todas las carencias que tuvo en su infancia, hoy Fernando Cornejo es concejal y preside las comisiones de Salud y Seguridad del municipio. Su recorrido desde ser barrendero de las calles de la comuna hasta ser parte integrante del Concejo Municipal resulta inspirador para todos aquellos que se encuentran en problemas y no ven una salida. Él habla desde su experiencia.
¿Qué consejo le daría a las nuevas generaciones que quieren surgir?
-Hay que sacrificarse porque nada es gratis en esta vida. Siempre aconsejo a los más jóvenes diciéndoles que estudien y que superen a sus padres. Mi hija me tiene que superar a mí y mi nieta a su madre. Tratar siempre de mejorar los estándares de vida. Yo terminé el colegio en la nocturna, donde incluso fui ayudante. La vida me premió por querer estudiar. En ese lugar conocí a mi señora y ya llevo 37 años casado con una hija y una nieta.
"Como ocurre en muchas familias, nos íbamos traspasando la ropa con los hermanos. Imagínate cómo llegaban los zapatos a mí que era el número 17",
Fernando Cornejo"
"Uno se debe nutrir de la gente. Tengo la frase del 'Puma' Rodríguez como lema: hay que escuchar la voz del pueblo",
Fernando Cornejo"
"En la campaña solo gasté 120.000 pesos. Reciclé letreros que tenía de la campaña anterior y con la devolución de votos gané plata",
Fernando Cornejo"