Mónica Jorquera Escobar
L a mañana de ayer un funcionario de un centro recreacional se encontró con una lamentable noticia cuando llegó a su puesto de trabajo.
Dentro de la garita de vigilancia halló al nochero Óscar Monsálvez Schulz (49) sin signos vitales. Llamó de inmediato a una ambulancia.
Cuando los paramédicos del consultorio de El Quisco llegaron al recinto de la caja de compensación Los Andes, en dicha comuna, no pudieron hacer nada, ya que Monsálvez Schulz había fallecido tras sufrir un infarto fulminante.
Luego de diligencias realizadas por efectivos de la Subcomisaría de El Quisco, se determinó que no había participación de terceras personas en el deceso.
El cuerpo fue remitido al Servicio Médico Legal para su autopsia.
El deceso del padre de familia causó gran conmoción en El Quisco, donde era muy querido.
Lo conocían por ser un exsargento de Carabineros y por su oficio de talabartero, ya que elaboraba hermosas piezas en cuero.
"Adiós querido don Óscar, dejó una pena muy grande en nuestros corazones y, al mismo tiempo, siento una gran alegría por haber podido compartir con una gran persona, un gran amigo, un excelente compañero. Gracias por todo lo que nos entregó a todos acá en este mundo", redactó Marcelo Aguayo en redes sociales.
Pablo Calvetti añadió que "un gran hombre, un gran padre y pilar de su familia. Lo extrañaremos mucho gancho, muchas gracias por ser tan buena persona, y siempre estar con una sonrisa en su rostro".
49 años tenía el nochero que ayer fue encontrado sin vida en un centro recreacional de El Quisco.
