El peligro de la creciente fuga de pacientes crónicos de los Cesfam a la red de urgencia
Jefe del Departamento de Salud Municipal dijo que hasta un 15% de horas médicas se pierde.
Un estudio de las universidades de Chile y Concepción estableció que los pacientes, al optar por una atención de urgencia de los Sapus o del mismo hospital y no concurrir a un especialista del consultorio, se estarían privando de acceder a una atención integral y con ello ponen en riesgo su salud.
La información a la que accedió Diario El Líder indica que San Antonio no está ajeno a esta realidad. Según los datos aportados por el hospital Claudio Vicuña, en abril del presente año, de las 3.983 consultas de adultos en el servicio de Urgencia, 2.054 pacientes concurrieron a esa unidad por una "urgencia no vital" o de las categorías ESI 4 y ESI 5 (ver recuadro lateral). En igual mes del año 2018, de las 4.053 consultas de adultos en Urgencia, 1.922 eran por problemas médicos que pudieron ser tratados en un consultorio o Centro de Salud Familiar (Cesfam).
Entre ambos periodos hay un leve aumento de estos casos pero los números son claros en señalar que prácticamente la mitad de los pacientes va a urgencia sin que sus afecciones sean de gravedad.
Natalia Ibacache, enfermera supervisora del servicio de Urgencia del hospital Claudio Vicuña, afirmó que esta dinámica genera consecuencias palpables. "El efecto es el largo tiempo de espera para los pacientes menos graves. La principal demanda es en medicina interna. Si se registra una emergencia, uno de los médicos internistas se dedica a atenderla y el otro se enfoca en las reevaluaciones, revisión de exámenes, etc, es ahí cuando la atención se enlentece".
La estrategia
José Luis Hernández, jefe del Departamento de Salud Municipal de San Antonio, explicó que efectivamente existe un alza del número de pacientes que en vez de concurrir a los consultorios para el tratamiento de sus enfermedades crónicas va a los Sapus o al servicio de Urgencia.
Hernández recalcó que una consulta en el sistema de urgencia implica que la persona recibe una atención menos integral, lo que se aleja del modelo Cesfam, cuyo "objetivo es entregar un modelo familiar, que está orientado a ser más preventivo y evitar el daño".
"La estrategia Sapu o de urgencia, que implicó una gran inversión de recursos en todo el litoral, porque hay otros Sapus en la provincia, significa que la comunidad se relajó un poquito en cuanto a la responsabilidad de su salud y tiende a consultar cuando el daño ya está realizado. En ese sentido, tenemos claro que es la peor estrategia", sostuvo el directivo.
Detalló que el sistema municipal de San Antonio ha detectado que hasta un 15% de las horas solicitadas por los pacientes crónicos se pierde porque ellos no asisten al Cesfam y prefieren ir al Sapu, recinto que termina colapsado en épocas invernales, especialmente. Todo eso involucra un impacto económico por cuanto se le paga a un médico que se quedó esperando a un enfermo que nunca asistió a la consulta.
Añadió que al prevalecer la urgencia por sobre la salud preventiva "perdemos la integralidad que da la atención de un Cesfam normal, donde el paciente puede ser visto por otro tipo de profesionales como sicólogo, médico, odontólogo, matrona, enfermera, kinesiólogo, o sea un equipo de profesionales que está preocupado de darle una atención más integral al paciente como persona, no solamente por lo que consulta, que es lo que pasa en el servicio de Urgencia. Lo peor es que el paciente determina cuándo consultar".
Para enfrentar esta situación, Hernández propone reformular el concepto de Sapu en conjunto con el hospital local y enfocarse en la educación y promoción de los buenos hábitos de salud, principalmente en los niños.
Y para descongestionar el servicio de Urgencia del hospital Claudio Vicuña, Natalia Ibacache afirmó que "se sugiere que en estos casos menos graves se inicie la atención en el Servicio de Atención Primaria de Urgencia (Sapu). Estos pacientes (ESI 4 y ESI 5) llegan al hospital por patologías crónicas, curaciones de heridas, revisión de exámenes, traumas y dolores de larga data, por lo que tienen que esperar, ya que se prioriza lo más grave o lo más complejo, esto último es lo que no puede ser resuelto en Atención Primaria de Salud (APS)".
José Luis Hernández confirmó que se inició un trabajo mancomunado con la dirección del hospital con el fin de crear un protocolo que "pretende georreferenciar los pacientes", de tal manera de que, con la información que entrega el usuario que concurre al servicio de Urgencia se pueda hacer un seguimiento después por parte del Cesfam.
Categorías
Desde el hospital Claudio Vicuña informaron que este centro asistencial utiliza el modelo ESI para categorizar a los pacientes que llegan al servicio de Urgencia. "Este tiene como objetivo que las personas en riesgo vital sean atendidas de forma inmediata. Por este motivo, un profesional de enfermería entrevistará a los pacientes y mediante la aplicación de un algoritmo establecerá su gravedad. El modelo habitual se enfoca en los signos vitales del usuario para determinar su gravedad, mientras que esta categorización, que contempla cinco niveles, utiliza información clínica y evaluación de los recursos requeridos", detallaron. En ese contexto, las categorías ESI 4 y ESI 5 corresponden a pacientes que no tienen patologías de urgencia y podrían ser atendidos en el Sapu o centro de salud familiar, de modo de evitar esperas prolongadas.
"Perdemos la integralidad que da la atención de un Cesfam normal",
José Luis Hernández, jefe del Departamento de Salud Municipal de San Antonio.