Un clásico ultraviolento: "Pulp fiction" cumple 25 años
El director Quentin Tarantino voló las cabezas de los espectadores con su original guión, estructura, violencia, humor negro y una banda sonora de lujo.
Un cóctel de violencia, drogas, música y cinefilia. Vincent Vega (John Travolta) seduciendo a Mia (Uma Thurman) en la pista de baile y más tarde reviviéndola con una jeringa directo al corazón tras un mal viaje con heroína. En el Festival de Cannes de 19 94, un hasta entonces poco conocido Quentin Tarantino presentaba el que probablemente sea el filme de culto más emblemático de los '90: "Pulp fiction".
Aunque parezca mentira, hace ya 25 años que la película del director norteamericano consiguió básicamente dos cosas: la Palma de Oro en el certamen francés y revolucionar al público. Detractores y entusiastas tienen en común la pasión que el filme despierta en ellos y es que, un cuarto de siglo después, sigue sin dejar indiferente.
La película cuenta una historia de tintes lisérgicos acotada por un prólogo y un epílogo que transcurren en una apacible cafetería. Todo lo que acontece entre medio responde a una ecuación de pura misantropía que se resuelve con un reguero de sangre y balas.
Los personajes, que por su modo de vida no podrían estar abocados a otro destino que el que les espera, guían al espectador por un camino lleno de imágenes delirantes que a veces provocan asombro y, en otras ocasiones, una perversa carcajada. Con "Pulp fiction", Tarantino revivió la carrera de Travolta y puso en órbita la de Uma Thurman, mientras que Bruce Willis demostró que era algo más que el protagonista de la saga "Duro de matar". Además, el director confirmó su sello de autor, ese mismo que dejó patente en su opera prima, "Perros de la calle" (1992).
Las referencias cinematográficas en esta historia de gánsteres son varias y eclécticas. Y como ha dicho el propio Tarantino: "Yo no estudié cine; simplemente, fui al cine". Amén de vistazos a películas clásicas, "Pulp fiction" es un compendio de la estética del cine clase B, solo que hecho a la manera de Quentin Tarantino. También es un repaso enciclopédico de la cultura pop, sobre todo la de los años '70.
El título de la cinta es otro homenaje; esta vez, a las novelas y revistas en papel barato (pulp, en inglés) de distintos subgéneros de ficción: misterio, horror, eróticas o de gánsteres.
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Estas son algunas de las cosas que aprendimos en "Pulp fiction" través de los diálogos, las relaciones entre sus personajes y algunas de las escenas más memorables del cine de los últimos años, junto con curiosidades de la cinta.
Un cuarto de libra: el cuarto de libra con queso de McDonald's debe su nombre al sistema métrico americano. En Francia, esa misma hamburguesa recibe el nombre de "Royal con queso", ya que el sistema de medición europeo es diferente. Sin embargo, una Big Mac es una Big Mac en cualquier parte del mundo. Y en Holanda le ponen mayonesa a las papas fritas en lugar de ketchup. Eso nos queda claro en la conversación en el auto entre Jules (Samuel L. Jackson) y Vincent Vega.
Asesino bíblico: "El camino del hombre recto está por todos lados rodeado por la injusticia de los egoístas y la tiranía de los hombres malos". Según Jules, esta frase aparece en el capítulo 25, versículo 17 del libro de Ezequiel en la Biblia, aunque en realidad no es así, pues fue tomado en realidad de la película japonesa "Karate Kiba" (1976), de Sonny Chiba. Pese a todo, lo repite cuatro veces durante la película, generalmente antes de apretar el gatillo.
Mal viaje: ningún médico recomendaría consumir heroína, pero si alguien decide hacerlo, no la debe aspirar. Un ejemplo de lo que puede suceder es la sobredosis de Mia, quien se encuentra una bolsa de polvo blanco en el abrigo de su acompañante y decide "empolvarse la nariz". Termina despertándose con una aguja clavada en el corazón en el suelo de la casa de un traficante de droga. La toma de Vincent inyectando adrenalina a Mia en realidad se filmó al revés: Travolta saca la jeringa de su pecho y la cinta corre hacia atrás.
Un as de las pistas: Aunque el tiempo corra y los kilos pesen, Travolta no pierde la gracia para el baile. 17 años después de dar vida a Tony Manero en "Fiebre del sábado por la noche", el actor volvió a protagonizar una de las escenas de baile que pasaron a la historia del cine: el twist con Uma Thurman. Después de la escena en Jack Rabbit Slims, se asume que el sicario y la esposa de su jefe obtuvieron el premio del concurso de baile. Pero, al final de la película, se escucha un boletín de radio sobre el robo del trofeo.
Perdonen mi francés: 265 veces aparece la palabra fuck en "Pulp fiction", cuatro menos que su anterior trabajo, "Perros de la calle". Con esta cifra se ubica en el lugar número 28 del listado de películas donde más se dice esta palabra. En el ranking, que existe en Internet, el primer sitio lo tiene la comedia canadiense "Swearnet: The movie", con un total de 935 ocasiones en que se pronuncia.
Auto robado: El Chevy Malibu 64 convertible de Vincent Vega pertenecía en la vida real a Quentin Tarantino. Durante el rodaje, el auto fue robado y no volvió a aparecer hasta 2013, cuando un policía atrapó a dos jóvenes que lo estaban desvalijando y se descubrió que era aquel auto robado del director
Hit independiente: la película costó solo 8 millones de dólares y terminó recaudando 213,9 millones a nivel mundial, convirtiéndose en la primera producción de cine independiente en ostentar esa distinción. En los años siguientes, cintas como "El proyecto de la bruja de Blair", "El tigre y el dragón", "Juno", y "¿Quién quiere ser millonario?" se unirían a esa lista.
Piloto de "Kill Bill": Mia actuó en el piloto de una serie fallida, que habría sido convertida en película. La describió así: "Había una rubia que era la líder, la japonesa era maestra de kung fu, la negra una experta en demoliciones y lo mío eran los sables". Es decir, "Kill Bill" la cinta en dos partes que Tarantino dirigió en 20003 y 2004.
El gran misterio: el maletín que llevan Jules y Vincent, que les ordenó recoger Marsellus Wallace (Ving Rhames) y que impulsa la acción de la película, contendría desde diamantes, pasando por un traje de Elvis y una arma nuclear, hasta el alma de Wallace.
Por Marcelo Macellari