Matrimonios azapeños salen al mundo por las redes sociales
Transmisiones en vivo vía streaming y una producción que se la quisiera cualquier artista, hacen de los casamientos en la región de Arica y Parinacota todo un acontecimiento internacional.
Alfredo Sanhueza - La Estrella de Arica
Para muchas parejas su boda, sin duda, es uno de los momentos más inolvidables de sus vidas, para lo cual nada queda al azar. La torta, la decoración de la iglesia, el lugar de la fiesta, el show, la ropa de los novios, el fotógrafo, hasta los partes de invitación forman parte de esta súper producción familiar.
En Chile han habido matrimonios que han marcado la pauta, con grandes recursos. Como no recordar el de Cecilia Bolocco con Michael Young en marzo de 1990, que se realizó en el Palacio Cousiño y que fue transmitido por todos los medios de comunicación de la época.
Para una pareja promedio chilena esa boda era un sueño inaccesible. Hasta que llegaron las ofertas de productoras más pequeñas y los tiempos de las redes sociales.
En el Valle de Azapa, donde la tradición aymara dicta que hay padrino para cada uno de los gastos de la boda, la fórmula del matrimonio ideal se cumplió, y hoy es posible ver todas las semanas "generosos" casamientos, que incluso pueden financiar transmisiones en vivo vía streaming a los cinco continentes a través de las redes sociales.
Verónica López y Alvaro Huarachi, pareja que se casó el pasado 13 de julio, lo hicieron así. Esta es su historia.
Redes sociales
El sábado 13 de julio Verónica López y Alvaro Huarachi ingresaron a una Catedral San Marcos repleta de familiares, amigos y colegas que los acompañaron en su matrimonio. Luego tuvieron una fiesta de cuatro días en el Club de Huasos de Arica, en el Valle de Azapa.
La historia de Verónica y Alvaro partió hace mucho tiempo cuando se conocieron mientras estudiaban en la universidad. Aunque el entusiasmo estaba, hace más de cinco años que la pareja buscaba la ocasión para realizar la ceremonia, topándose con diferentes obstáculos cada año, incluyendo un negativo diagnóstico médico. "El año pasado le dije a Verónica que este año nos íbamos a casar sí o sí, y arrendé el Club de Huasos y entregué la boleta. Hicimos la promesa de casarnos haciendo la fiesta más bonita", comenta Huarachi.
Uno de los detalles que se incluyeron en la boda fue la contratación de la productora boliviana "Gran Faraón", que se encargó no solo de grabar cada momento del evento, sino que realizó, además, una transmisión en vivo vía internet, la que pudo ser vista por familiares de la pareja desde Bolivia, Perú, Chile, Argentina e incluso Europa.
Según cuenta Álvaro Huarachi, "había personas de España que también vieron la transmisión; ellos (la productora) trabajan con cuatro cámaras, entre ellas una grande que emplea una grúa".
Además, durante las transmisiones de la boda, dos animadores estuvieron a cargo de dirigir el evento: Ingrid Blanco, conocida como "Sherry" y César Choquechambe. "Hicimos el papel de presentadores y de periodistas también junto a la productora, partimos el viernes con la challa al Club de Huasos, explicamos durante la transmisión de qué se trataba cada tradición. El sábado estuvimos durante la ceremonia, en donde tuvimos más de mil visitas; registramos la fiesta de gala con las costumbres como el vals o el agradecimiento de los novios a cada uno de sus padrinos. Ya el domingo continuamos con repartición de la gran torta que tuvo la ocasión y la fiesta que duró hasta las 4 de la mañana. Ya el lunes era una celebración más entre familiares", relata Ingrid Blanco, quien además ha participado como animadora del Carnaval Con la Fuerza del Sol de Arica, y como conductora de un programa radial ariqueño.
Padrinos y cariños
Como la tradición aymara de la zona dicta, la familia y amigos se repartieron los gastos del matrimonio, con la fórmula de un padrino para cada uno de los gastos.
Así, la feliz pareja decidió realizar una gran celebración, la que resultó incluso más grande de lo que ellos buscaban: cuatro días de festejo, una banda boliviana, 11 orquestas, cuatro cámaras, transmisiones que llegaron a otros continentes y más de 4 mil invitados, en lo que fue una de las bodas más grandes hechas en la región.
Con la magnitud del evento, cuesta creer que en realidad no hubo una productora que estuviese tras la organización de todo. Según explican Alvaro y Verónica, la mayor parte de la planificación fue delegada entre familiares y amigos, siendo esencial la participación de los padrinos de la pareja. "Teníamos seis padrinos: Juan Carlos Cruz y Sandra Tupa fueron de iglesia; Ricardo Lovera con Magaly Lazaro, padrinos de civil; Omar Ayca y Verónica Zambrano, padrinos de torta; Josefina Gómez e hijos, padrinos de argolla; y el padrino de orquesta fue Jorge Calle y pareja. Él me apoyó durante mi enfermedad en Santiago, el trajo la orquesta del grupo Karma, que por primera vez viajó a Arica; además de Marcela González y Alfonso Mamani, ellos nos trajeron un grupo peruano, por eso quise que nuestros padrinos fueran especiales, con una historia diferente que nos marcaron", agradece Alvaro.
Además, los llamados "cariños" fueron en gran número, consistentes en un regalo por parte de un conocido o amigo que desea entregar un gesto a los casados, incluyendo dentro de eso parte de las gestiones, entre ellas algunas orquestas y la propia producción audiovisual. "Esto fue gracias a la ayuda de familiares y amigos, que con cariño se hicieron cargo", revela Verónica.
Por otro lado, el diseño decorativo de todo el evento estuvo a cargo del profesional Víctor Choque, de Perú, quien además organizó los tiempos de cada etapa. En la parte fotográfica participaron Rubén Loza, Ely Reyes y Esteban Morales. Mientras que la parte festiva en el Club de Huasos estuvo a cargo de "Piter Sonido e Iluminación" en una fiesta que duró hasta el lunes con gran cantidad de gente, la que ni la propia pareja se esperó que rebosara el local, y una torta de 34 pisos por parte de la pastelería Alex's Cake.
"Personas de otras partes del mundo vieron la transmisión"
Alvaro Guarachi,
el novio
12 orquestas
Entre los preparativos, el novio decidió buscar especialmente a una banda boliviana que acompañara durante los tres días de fiesta y con ayuda de un primo, finalmente logró traer a la orquesta La Pagador de Oruro, que solamente viaja a Arica para participar del Carnaval Con la Fuerza del Sol. Junto a La Pagador, se contrataron seis orquestas, pero gracias al apoyo de sus seres queridos, finalmente el número de músicos ascendió a un total de 12 conjuntos musicales, la banda de Oruro y 11 orquestas. "Cuando iba a los matrimonios siempre había una o dos orquestas, pero esa tradición se ha ido perdiendo en Azapa, en Bolivia se hace, así que decidí traer a la banda por cariño a mis tíos, a mis padres, a mis caseros y a los familiares de Bolivia", dijo Alvaro, mientras que Verónica agregó que "la gente se sorprendió que trajéramos a esa banda porque es conocida en Bolivia, fue especial porque era primera vez que tocaban en un matrimonio".