Emblemática directora habla sobre los desafios de los profesores
María Martínez Kenig además cuenta que espera ir delegando funciones en el colegio.
María Martínez Kenig dice que nació con la vocación de ser profesora. Que no hubiese entendido la vida si no es desde la docencia.
Tanto es así que en un momento de desesperación, cuando en época del Gobierno Militar, le impidieron levantar el ahora colegio María Kenig, se armó de valentía y le escribió al mandamás de Chile por ese entonces Augusto Pinochet sobre su deseo de abrir un nuevo recinto educacional.
"No sé por qué no querían que abriera un colegio. Yo estaba en una época muy complicada porque me había ido de la Escuela 5 de ese entonces, hoy Colegio España, por el año 80. No tenía trabajo y tenía ganas de tener un colegio", detalla esta mujer de hoy de más de 70 años. "La verdad es que ya perdí la cuenta de los años que tengo", dice entre risas.
Martínez tras estudiar en la escuela Normalista llegó a su natal Santo Domingo. "A mí siempre me gustó el campo y por lo mismo me fui a trabajar a la Escuela de Bucalemu, a principios de los 60. Fueron años muy buenos y conocí grandes niños, estudiantes y personas", recuerda en su oficina de calle Cardenal José María Caro.
"Nuestro colegio estaba ubicado antes en Llolleo, donde hoy está la bencinera que queda cerca de la Parroquia. Tras el terremoto quedó media mala entonces quería levantarla donde hoy está ubicada", recuerda.
Luego de contar con los permisos para edificar el nuevo recinto, Martínez dio paso a este establecimiento educacional que se ha convertido en su vida.
"La verdad es que nunca es fácil tener un colegio. De hecho ahora lo encuentro bastante complicado. Pero a mí siempre me gustó esto. Para uno es como una segunda familia, pero si espero descansar, quizás desde el próximo año delegue responsabilidades", explica emocionada esta madre de cinco hijos, abuela de 15 nietos y cuatro bisnietos.
"Tenía que andar corriendo de un lado para otros con mis hijos. Incluso dos de ellos son profesores. Pero es compleja hoy la labor de los docentes, porque además deben convivir con otras situaciones, como es el caso de niños con problemas alimentarios, económicos, sicológicos entre otros problemas que gatillan en la educación. Por eso la misión en nuestro colegio es apoyarlo en lo que ellos quieran ser y brindarle una buena educación", destacó María Martínez Kenig.
60 En esta decada la directora del Colegio María Kenig comenzó su labor de docente.