Rodrigo Ogalde Cofré

Un solitario juez del Tribunal Oral en Lo Penal (TOP) de San Antonio leyó ayer la sentencia que deberá cumplir un hombre de 73 años que la semana pasada fue condenado por violar en forma reiterada a su propio nieto, entre 2017 y enero de 2019, en la comuna de El Tabo.

El magistrado estaba solo en su estrado porque los intervinientes "se excusaron" de asistir a la audiencia, incluso no concurrió ni siquiera el acusado.

El fallo determinó que el hombre deberá cumplir una condena de 15 años y un día de cárcel como "autor del delito consumado de violación impropia, en carácter de reiterado, cometido en contra de su nieto", quien tenía 11 años cuando comenzaron los ataques sexuales.

Además, al anciano se le sentenció a la inhabilitación perpetua para ejercer cargos y oficios públicos y para hacer uso de sus derechos políticos. Mientras dure la condena tampoco podrá desempeñar profesión alguna.

De la misma manera, el condenado deberá estar bajo sujeción de la vigilancia de la autoridad en los 10 años siguientes al cumplimiento de la pena de cárcel, como también a la inhabilitación perpetua para ejercer profesiones u oficios en el área de la educación o en que pueda tener directa relación con menores de 18 años.

El viernes 30 de agosto, en la última audiencia previa a la lectura del fallo condenatorio, el menor que fue víctima de este hecho expresó sus sentimientos. "Quiero que se haga justicia, que me devuelvan mi niñez", sostuvo el niño que hoy tiene 13 años.

Además del grave acto de violar a su nieto, en la familia de la víctima generó mucho dolor que el anciano justificara sus delitos, ya que ante los magistrados afirmó que fue el menor quien lo incitaba a cometer lo que él mismo calificó como "un juego sexual". En ese contexto, el sujeto aseveró que "era un juego sexual que tenía con él. (…) Se me insinuaba, me ponía caras como diciendo 'ven conmigo'".

El fiscal del caso, Alvaro Mansilla, dijo la semana pasada que el niño "presenta un daño que modificó su personalidad. Es un daño emocional que no tendrá cura".

Privado de libertad, a la espera del pronunciamiento de la Corte de Apelaciones, quedó un hombre de iniciales L.A.H.C. de 37 años, que fue detenido el lunes por personal de la Primera Comisaría de Carabineros de San Antonio como uno de los supuestos autores de un asalto que afectó al nochero al interior del terminal de microbuses ubicado en la calle San Antonio de Las Bodegas, en el sector de Bellavista.

La fiscalía local le imputa su participación en el robo con violencia registrado la madrugada del pasado lunes, cuando cuatro sujetos armados ingresaron a dicha propiedad para luego amenazar al trabajador y lanzarlo desde el segundo piso. Los ladrones robaron el dinero de una caja fuerte, siete computadores, un TV y un teléfono celular, todo avaluado en $3 millones.

Pese a que el juez de Garantía de San Antonio, Daniel Núñez, acogió la solicitud del Ministerio Público para allanar la vivienda artesanal que habita L.A.H.C. , el mismo magistrado declaró ilegal la detención por cuanto en el lugar no se hallaron las especies que habían sido sustraídas desde el recinto donde aparcan los microbuses.

El fiscal Juan Carlos Catalán formalizó al imputado por el delito de robo con violencia e intimidación, ya que habría grabaciones de video que lo muestran colaborando con el acarreo en carretilla de las especies robadas en dicho terminal.

Si bien el juez Núñez determinó dejar en libertad al implicado, el representante del Ministerio Público apeló a esa resolución, por lo que será la Corte de Apelaciones de Valparaíso la que tendrá que definir cuál será el destino de este hombre.