Educadoras de párvulos se niegan al proyecto de Sala Cuna Universal
Esta propuesta del Gobierno fue aprobada en la Comisión de Trabajo del Senado. Sanantoninas explican la "letra chica".
Carteles en mano. Delantal verde. Y con un repertorio de canciones, cientos de educadoras de párvulos y asistentes salieron a marchar por una mejor educación para los niños preescolares.
La jornada comenzó a eso de las 11 de la mañana en la plaza de Armas de la comuna de San Antonio hasta donde arribaron también padres y apoderados de los jardines infantiles de la zona.
Uno de ellos fue un sanantonino quien junto a su hijo llegó a marchar ayer y confesó a nuestro sitio web SoySanAntonio.cl que decidió salir a a la calle porque "necesitamos solucionar la desigualdad acá en Chile. No basta solo con cambiar ministros".
"Tenemos la experiencia que cuando se ha parado el movimiento, después no ha pasado nada", advirtió este padre junto a su familia.
Sala cuna universal
Diversas dirigentas y educadoras de párvulos señalaron ayer, durante la manifestación, que el sistema se encuentra con un déficit en la dotación de educadoras preescolares para garantizar una educación de calidad a todos los niños de la provincia.
Sin embargo, el gran cuestionamiento de las "tías" tiene que ver con el proyecto de ley de Sala Cuna Universal impulsado por el gobierno del Presidente Sebastián Piñera. A principios de mes fue aprobado en la Comisión de Trabajo del Senado y ahora deberá ser revisado en la Cámara de Diputados.
¿En qué consiste? Según han explicado desde el Gobierno, esta medida beneficiaría a toda la fuerza laboral, sin distinción entre trabajadores dependientes o independientes, y pondrá fin a la discriminación del Artículo 203 del Código del Trabajo. Este restringe el beneficio de sala cuna solo a aquellas empresas que tengan más de 20 mujeres.
Según indica el texto de este proyecto, el Estado en conjunto con el empleador deberá cubrir el gasto de esta nueva propuesta. La empresa agregará una cotización adicional del 0,1% de las remuneraciones o rentas imponibles, mientras que el Estado tendrá la obligación de aportar, de forma permanente, US$16,26 millones, para los cuidados y educación de los niños hasta los dos años.
También se establece que el organismo que regulará y fiscalizará será la Superintendencia de Pensiones, mientras que la administración del seguro estará a cargo de una sociedad anónima de capital mínimo. Una especie de AFP.
Cuestionamientos
Paola Opazo, dirigente de la Junji en San Antonio, expresó que el Gobierno no ha mencionado "la letra chica de este proyecto de Sala Cuna Universal".
"Esta ley dice que solamente se beneficiará a los padres que tengan contrato, por lo tanto, no favorecerá a las personas temporeras, que trabajen por turno en San Antonio. Es importante que todos los niños tengan una educación de calidad no dependiendo de un contrato de los padres", describió.
A nivel nacional, específicamente desde la CUT, han criticado este proyecto ya que el pago del bono será dependiendo de las horas de trabajo de los padres. Además, detallan que para acceder al bono se debe contar con seis cotizaciones en el sistema del AFP. Si un trabajador no cumple este requisito no tendrá acceso al bono.
"Las políticas para los niños siempre han sido deficientes. Nuestro deber es defender los derechos de los niños y niñas, y como ellos no pueden salir a la calle, lo hacemos nosotros, las personas y las que somos madres", dijo Opazo, quien recalcó que lo que "se necesita son más recursos para los jardines".
Marcela Flores es técnica en párvulo y pertenece al jardín Caracolito de Bellavista. Ella sostiene que "con esto van a desaparecer los niveles medios de los jardines infantiles. Es decir que cuando un niño salga del jardín se va a ir al sistema escolar".
"Los niños necesitan moverse, explorar el mundo y así aprenden. Si se escolariza, en un sistema que es bastante rígido, el niño no aprende. No podemos permitir que los niños estén sentados todo el día en los colegios. Con este sistema los niños se frustrarán porque no hay un momento de jugar y esto afectará el nivel familiar, ya que esto trae consecuencias de salud", afirmó.
"Las políticas para los niños siempre han sido deficientes. Nuestro deber es defender los derechos de los niños y niñas",
Paola Opazo, dirigenta Junji.