Dueños de negocios anuncian despidos por falta de clientes
"El problema es que después de la marcha es cuando aparecen los vándalos y saqueadores", dijo una de las comerciantes afectadas.
Es jueves 31 de octubre y faltan pocos minutos para la una de la tarde. Y lo que debía ser una locura, a esa hora, para Arturo Silva (49), dueño del restaurante "El rincón del Puerto" ubicado en pleno centro de San Antonio, se ha convertido en un sufrimiento que lo tiene desesperado.
"Yo abrí recién este lunes. Estuve una semana sin poder abrir y tengo que pagar cuentas y sueldos. Además al dueño del recinto, porque arriendo este espacio, no le interesa si tengo o no para pagar", cuenta en su restaurante, a un costado de la parroquia de San Antonio.
"El rincón del puerto" está vacío. Afuera del recinto tres garzones buscan convencer a la poca gente que a esa hora circula por Centenario para que almuercen en el local. Sin embargo, los transeúntes pasan rápido y casi sin ver y menos escuchar lo que dicen estos trabajadores.
En la cocina, una mujer venezolana prepara la comida junto a Silva, quien confiesa que durante los próximos días el personal se reducirá.
"Yo acá le doy empleo a ocho personas y voy a despedir a dos, porque no me da para pagar, ya no me está dando", dice con tristeza.
Para graficar lo que ha sucedido en estos últimos días comenta que "nosotros acá en un día normal atendemos entre 24 a 30 mesas. Ayer (miércoles) tuvimos apenas tres. Lo que está pasando nos va a llevar a pique".
"Nos hemos visto complicados con lo que está pasando. Yo estoy de acuerdo con todo lo que estamos luchando, pero no comparto que haya tanto, pero tanto vandalismo. Una cosa es protestar y lo otro es ser miserable", agregó.
Intranquilidad
María Fuentes, de El Cristal, al igual que Arturo Silva, expresa que "hoy la gente tiene miedo, está intranquila, insegura y no sale a la calle".
"Las marchas son todas normales; el problema es que después de ellas es cuando aparecen los vándalos y saqueadores. Por ejemplo, acá en San Antonio por las tardes no anda nadie y es ahí donde se arman las trifulcas", menciona Fuentes, quien da empleo a tres trabajadores.
"Tuve cerrado el local varios días o hasta mediodía atendía. La cosa es complicada porque hay cuentas que pagar, los sueldos y también porque nadie quiere vivir así", destacó.
En el centro de San Antonio varios locales atienden con las cortinas a medio abrir o simplemente el ingreso es a través de una reducida puerta.
Uno de ellos es el local Cumpleaños Martita, ubicado en Bombero Molina 110, San Antonio. Francisco Jara dueño del negocio detalla que "hemos tenido que mantener cerrado varios días y gracias a Dios la cosa se ha compuesto en los últimos dos jornadas".
Y uno de los motivos es la fiesta de Halloween que ayer sacó a cientos de sanantoninos a la calle para adquirir dulces o disfraces.
"Teníamos tres trabajadores y tuvimos que bajar a dos por lo mismo que está pasando. Está muy difícil para todos. Llevamos como 10 días sin flujo normal de ventas", afirmó este pyme.
Jairo Marquina (54) vende artículos de aseo en la galería que está a un costado de la Escuela Industrial de San Antonio.
"Hemos tenido suerte porque a nosotros no nos ha pasado nada acá. No han saqueado ni tampoco han roto algo", parte diciendo este hombre.
"Anda muy poca gente por el centro. Se ha notado mucho y eso es preocupante porque nos puede hacer perder el trabajo", dice este vendedor.
La marcha convocada ayer en San Antonio ya pasó por el centro de la ciudad, el que ha quedado casi desértico cuando son casi las 14 horas.
A esa hora los garzones de "El rincón del puerto" continúan buscando clientes para su restaurante, en un desolador centro de San Antonio.
"Yo acá le doy empleo a ocho personas y voy a despedir a dos, porque no me da para pagar, ya no me está dando",
Arturo Silva, dueño "El rincón del puerto".