Ayer el Banco de Chile de Llolleo lucía latas de zinc en todo su frontis. Había sido cerrado con dicho material tras el ataque incendiario que sufrió la tarde del lunes pasado.

El fuego, que comenzó tras la acción de encapuchados, afectó a gran parte de la sucursal bancaria, originando que ayer se encontrara inoperativa.

"Se hacen filas largas en todos los bancos, yo acá aún podía venir a sacar plata del cajero automático y ya no. No estoy de acuerdo con los daños que hacen algunos tipos que ni siquiera salen a marchar", opinó Angélica Escobar.

Pese a que las llamas que se registraron en el banco alcanzaron grandes dimensiones, afortunadamente no afectaron a los locales aledaños a la sucursal.

"Es muy triste ver a sanantoninos haciéndole daño a otros sanantoninos con los saqueos, robos, destrozos de la propiedad pública y privada, barricadas que destruyen las calles por donde todos transitamos y las sucursales de bancos que todos usamos (...)", expresó ayer la gobernadora provincial, Gabriela Alcalde.

Agregó que "quienes andan destruyendo y quemando no tienen ni un poco de cariño ni amor por San Antonio".

Mónica Jorquera Escobar

La madrugada de ayer dos camioneros arribaron hasta el centro de acopio de la empresa Transportes Cerda para realizar un viaje.

Sin embargo, cuando llegaron hasta el sitio en el sector de Agua Buena, comuna de San Antonio, descubrieron que los dos vehículos cargados que debían conducir hacia la Región Metropolitana no se encontraban. Habían sido sustraídos.

Desconocidos ingresaron hasta el galpón ubicado cerca de las oficinas de la Coca Cola y sin ser vistos escaparon con dos camiones marca Mack, cada uno cargado con un contenedor de 20 pies.

"Eran cerca de la 5 de la madrugada cuando los choferes descubrieron que no estaban los camiones, que son de mi padre. Son su sustento y sin ellos dejan a mi papá de brazos cruzados", expresó la hija de Lorenzo Cerda, dueño de Transportes Cerda.

Los dos camiones permanecían con carga, contenido que no fue revelado a la prensa por motivos de seguridad de la propia empresa de transporte.

El robo de los dos vehículos fue avaluado en 50 millones de pesos, a lo que se suman otros $3 millones de pesos de los contenedores. El delito fue denunciado la misma mañana de ayer en la Policía de Investigaciones.

La Brigada Investigadora de Robos se encontraba ayer realizando pesquisas para dar con el paradero de los dos vehículos de carga.

Ayuda

"Mi papá ha recorrido distintos lugares como María Pinto y Puangue (Melipilla) en busca de los camiones, porque dicen que ahí los van a desarmar. Llamamos a quienes tengan información sobre los camiones a que se comuniquen con Carabineros o al celular +56963741730", solicitaron desde la empresa afectada.

Uno de los camiones sustraídos es de color rojo marca Mack, placa BFHB88. El otro es de la misma marca , blanco con azul, patente RV6904.

Al cierre de esta edición aún no se hallaban los vehículos.