Como bien señaló el abogado constitucionalista Gastón Gómez esta semana: Hay que respetar el orden institucional para cambiar la Constitución.
Los que pueden conducir a una salida institucional no están en las calles. Son las autoridades de Gobierno y el Congreso quienes tienen las facultades constitucionales para iniciar y dar lugar a procedimientos correspondientes. Si no lo hacen serán ellos los responsables de que la situación se agrave aún más, no la sociedad civil, no los que marchan o repletan las plazas del país.
Un proyecto de reforma constitucional puede ser con una combinación de varias cosas, no sólo una Asamblea Constituyente, existen mecanismos a través del Congreso, del Presidente, o una fórmula acordada entre ambos.
Se valoran las palabras del Presidente para abrirse a debatir estos temas, pero seamos responsables, existe una infinidad de posibilidades para realizar cambios a la constitución, las cuales no involucran temas partidistas ni una Asamblea Constituyente.
Soledad Rodríguez
Economista