El sueño de Llolleo aún está vivo...
Si bien en el último tiempo no se ha hablado mucho de la propuesta para ser comuna, el presidente de la Corporación de Desarrollo, Jorge Alvarez, asegura que no se han rendido. Es más, afirma que se están haciendo cosas para visibilizar esta propuesta.
"Noooo, para nada. No nos hemos olvidado del sueño de ser comuna".
Así responde Jorge Alvarez, presidente de la Corporación de Desarrollo de Llolleo, al ser consultado sobre si el proyecto de que Llolleo se convierta en una comuna está olvidado.
Es más, Alvarez es enfático en señalar que hay energías que están movimiento esta maquinaria, pero que también es cierto, se ha encontrado con algunas trabas que podrían entorpecer el movimiento de los engranajes.
"Llolleo tiene todo para ser comuna", dice una vez más este dirigente de 71 años, que si bien es melipillano de nacimiento, aprendió a amar este territorio como su verdadero hogar. Por eso se quedó aquí.
Indica también que se pueden hacer comparaciones odiosas con otras comunas de la provincia de San Antonio y si nos ponemos en ese plano -dice- "vemos que no hay muchas diferencias. Hay algunas comunas que son balnearios y en verano tienen un importante aumento de población, pero hay que pensar que Llolleo tiene un población cercana a los 47 mil habitantes, tenemos colegios, mucho comercio, oficinas de servicios como el Conservador de Bienes Raíces, etc. Lo único que no falta y que sería de mucha utilidad es una notaría".
SeparACIÓN
El anhelo de ser un territorio independiente de San Antonio -comenta Alvarez- es una aspiración de larga data: 50 años por lo menos.
"En realidad siempre debió ser comuna, separada de San Antonio, ya que los intereses han sido distintos. Por un lado se aspira a ser un gran puerto y todo lo que significa la actividad portuaria. Y en segundo lugar está lo relacionado con la pesca artesanal. En cambio, Llolleo aspira a recuperar la tranquilidad de la ciudad ideal para vivir. Aspira a ser una ciudad dormitorio, universitaria, turística, con actividades científicas y culturales. Buscamos que este territorio sea reconocido como la ciudad del corazón, por su clima bueno para sanar las enfermedades cardiacas, aspiramos a ser una ciudad con actividades relacionadas con seminarios de cardiología y otras actividades científicas. También deseamos tener actividades culturales como, por ejemplo, conciertos, obras de teatro, actividades corales y de poesía. Aspiramos a una ciudad con más cultura", se resalta dentro de los objetivos de la Corporación de Desarrollo.
Llolleo nació como balneario luego de la llegada del ferrocarril, hacia 1912. Ubicado al norte de Santo Domingo, separados por el río Maipo y al sur de San Antonio, separados por grades dunas y el estero El Sauce. Su planificación fue de "ciudad jardín" con chalet aislados, rodeados de jardines y adornados con palmeras. Es un paseo para recorrer sus calles onduladas, circulando entre plazas y antiguas construcciones.
También tuvo prestigio como la ciudad del corazón, dada la benevolencia de su clima apto para personas con problemas cardiacos.
Junto con el desarrollo de servicios también se ha fomentado el comercio y la bohemia con renovados establecimientos de esparcimiento nocturno.
En ese aspecto, destaca el dirigente llolleíno, ha sido importante la reciente conformación de la Cámara de Comercio que reúne a los trabajadores del rubro que están afincados en este sector.
Desafío
Jorge Alvarez es uno de los dirigentes que ha asumido como propia la tarea de engrandecer este territorio.
-¿Cómo va el proceso de Llolleo para ser comuna?
-Está pendiente, es un proceso demoroso para que nos den una respuesta.
-¿Qué pasa si cambian las autoridades?
-Más se demora, el proyecto va quedando en la Subdere.
-¿Cree que el proyecto de Llolleo comuna esté durmiendo en algún cajón?
-Hay que reconocer que estuvo un par de años durmiendo en un cajón. Cuando nos reunimos con las autoridades de la Subsecretaría de Desarrollo (Subdere) vimos que éramos como nueve territorios que estábamos haciendo gestiones para ser nuevas comunas, pero luego cuando fuimos otra vez ya eran más de 80 en esa misma instancia.
-¿Qué pasó?
-La subsecretaría cambió el sistema de evaluación de las ciudades para que puedan ser comunas. Una universidad se hizo cargo de eso y se demoró como dos años en esos trámites.
-Entonces, ¿en qué quedó todo?
-Eso ya está listo, pero ahora falta que las autoridades alimenten el programa. Ahora con el tema de la contingencia nacional ese programa de evaluación debe estar abandonado.
-¿Cómo se puede reactivar eso?
-Insistir nomás. Hay parte política involucrada.
-¿Y ustedes han hecho gestiones en ese ámbito?
-Bueno, hay que dejar en claro que en esta corporación no se privilegia ninguna tendencia política. Buscamos apoyos y sostuvimos reuniones con los senadores Ricardo Lagos Weber y Francisco Chahuán; este último nos ha ayudado mucho.
-¿No cree usted que si Llolleo es comuna se debilitará San Antonio?
-Eso se ha dicho muchas veces, pero mire, yo hago la siguiente analogía. Cuando un joven vive en su casa cómodamente, tiene de todo, la ropa limpia, sus comidas del día, la mamá lo atiende, pero llega un día y dice: quiero casarme. Allí la mamá le dirá 'para qué te vas a casar si aquí tienes de todo, para qué te vas a ir, ¿qué te pasa?' El joven entonces le responderá que sí, que está cómodo, pero en algún momento querrá tener lo suyo para desarrollarse. No importa que sea más pobre al principio, pero es lo suyo. Con las ciudades pasa lo mismo
-¿Ha tenido impulso este proyecto?
-Llolleo está reaccionando a través del comercio. Hay personas que tienen empuje y ganas de hacer cosas. Ellos se han puesto la camiseta. Esa es la idea.