Pablo Jesús Gómez
El nacimiento de sus dos nietos mellizos fue el principal motivo para que Ingrid Pino (50 años) comenzara a escribir relatos infantiles. Sin ninguna proyección más allá que leerles posteriormente estos escritos a sus nietos, la sanantonina poco a poco fue desarrollando un talento que sin proponérselo la convirtió actualmente nada menos que en escritora de cuentos terapéuticos.
"Siempre había escrito situaciones y experiencias de la vida y que son cotidianas que uno va viendo. Las escribía en Facebook y hartas personas las comentaban y les gustaba. Pero ahora cuando supe que iba a ser abuela hace dos años atrás de mellizos me puse a escribir cuentos para contárselos a ellos", reconoce Ingrid Pino, agregando que "le pedía consejos a un poeta amigo, Luis Barbieri, y fue así como posteriormente llegó uno de mis cuentos a manos de una escritora argentina que es sicóloga infantil y que me comentó que mis cuentos eran terapéuticos, por lo que me felicitó".
-¿Usted conocía este género de la literatura infantil?
-La verdad que no sabía que lo que significaba, ya que acá en Chile no se conoce mucho, pero la escritora argentina me dijo que en su país y en Europa eran muy recurrentes. Y claro, al darme cuenta de mis cuentos y mi forma de escribir, todos venían en ese estilo del cuento terapéutico.
El primer libro
Tras estas recomendaciones de la escritora argentina Alejandra Torinio, Ingrid Pino realizó diferentes talleres para seguir perfeccionado su escritura terapéutica.
"Hasta que otro amigo escritor me dijo por qué no publicaba mis cuentos. Mandé los borradores a cinco editoriales chilenas y al otro día ya se contactaron conmigo para felicitarme por el trabajo que estaba realizando. Así que me decidí por la que más me convenía, que la fue la editorial Ursus, y así empezamos en septiembre del año pasado con la creación del libro 'Cuentos Sanadores', que es mi primera publicación impresa", detalla con orgullo la sanantonina que reside en el sector de Los Geranios en Llolleo.
-¿Cómo se va desarrollando este primer libro que pudo publicar?
-El libro cuenta con siete cuentos terapéuticos que tienen ilustraciones muy bien realizadas. Por ejemplo uno consiste en una araucaria que se sentía sola en la localidad de Melipeuco, porque las demás araucarias crecen todas juntos por el tipo de semillas que tienen, que es el piñón. Entonces ella lloraba y se sentía sola, hasta que llega un peuco, un pajarito del sur de Chile que se destaca por ser sociable y le empieza a explicar que ella no está sola, que tiene la compañía de la naturaleza, del sol, de la tierra, el viento, que todo eso que la rodea la acompaña. Y eso también pasa en la vida de los niños, que están muy acompañados pero que en el fondo se sienten solos.
-¿Qué siente al ver que sus cuentos ahora son un libro que podrá estar a disposición de mucha gente?
-Me llegaron las cajas con los libros impresos antes de Navidad. Tengo amigos escritores que me decían que esto es como el primer hijo, pero yo les digo que no, que siento como que toda la vida he escrito estos cuentos, entonces no me ha pasado eso.
Ya en librerías
El libro "Cuentos Sanadores" ya se encuentra disponible en algunos puntos de San Antonio para poder ser adquirido. "En estos momentos está en la librería Clip, al lado del ABCdin en San Antonio y dentro de la próxima semana estará en la Librería 123 de Llolleo. También para el día del lanzamiento habrá un valor especial para que los presentes puedan adquirirlo", detalla Ingrid Pino.
¿Cuáles son sus proyecciones como escritora terapéutica?
-Me gustaría seguir escribiendo y que este sea el primer libro, pues ha tenido buena crítica y también está siendo vendido en las librerías Qué Leo de La Dehesa y Chicureo, por lo que es algo que no me esperaba. En lo personal siempre me ha inquietado el tema de los niños, ya que estuve trabajando en el 2004 en la toma de Peñalolén y he conocido muchas realidades que existen lamentablemente hasta el día de hoy. Por eso me gustaría que estos cuentos lleguen a los niños del Sename, del Junji, y presentárselos para que los conozcan.