Cayó sicario que recibió $10 millones por matar a un hombre
La Brigada de Homicidios de la PDI lo encontró en Las Cruces, donde estaba escondido tras cometer el crimen en el sur del país.
Un violento e inédito crimen que dejó a una localidad del sur de Chile impactada tuvo su desenlace en Las Cruces.
En la comuna de El Tabo, la Brigada de Homicidios (BH) de la Policía de Investigaciones de Valdivia atrapó a un peligroso sicario al que estaban rastreando desde noviembre pasado, cuando ocurrió un asesinato en la localidad de San José de la Mariquina, en la Región de Los Ríos.
La policía encontró dentro de un taxi el cuerpo de Raimundo Osses Sepúlveda (33). Lo habían matado por encargo de un certero balazo en la cabeza.
Luego de una larga investigación, los detectives descubrieron que el supuesto asesino era un hombre de 37 años que luego de cometer el crimen escapó para esconderse en el balneario de Las Cruces. Según la indagación, huyó después de cobrar 10 millones de pesos por matar a Osses Sepúlveda.
Dos sicarios
La investigación también reveló que la víctima y el homicida tenían más de algo en común: los dos eran sicarios y ambos fueron contratados por la misma persona.
Según explicó el comisario Ricardo Cabrini, de la Brigada de Homicidios de Valdivia, los hechos se remontan al año pasado, cuando un reo de la cárcel de Rancagua contrató a Raimundo Osses para matar a una mujer que lo había estafado.
La fémina, pareja de un antiguo socio del recluso, se habría quedado con un terreno que adquirió con el dinero del preso, que provenía de estafas telefónicas. Debido a que la mujer se negó a traspasar las tierras a nombre del interno, éste pagó para que la asesinaran.
"La persona que cumple condena mandó a un sicario para que la matara, pero este sujeto se arrepintió en el camino luego de haber cobrado $10 millones", detalló el comisario Cabrini.
Según la policía, Osses Sepúlveda se retractó de cometer el homicidio porque se enteró que la que sería su víctima tenía un hijo con discapacidad.
Como el sicario no cumplió su palabra pese a haber cobrado el millonario monto, el reo contrató a un nuevo asesino, identificado como Jorge J.O., para que matara a Osses Sepúlveda.
El 30 de noviembre pasado el segundo sicario sí cumplió el acuerdo. Mató a su blanco luego de cobrar $10 millones de pesos. Tras el homicidio se ocultó en Las Cruces y una mujer que le proporcionó el arma homicida se escondió en La Pintana.
El martes de esta semana la pareja fue aprehendida por la PDI por el delito de homicidio.
A Jorge J.O. se le controló la detención en el Juzgado de Garantía de San Antonio, desde donde lo enviaron al tribunal de San José de la Mariquina para que lo formalicen.