Feriantes de luto: ayer partió uno de los comerciantes más antiguos de la comuna
Nelson Vásquez Lamarque, Ciudadano Ilustre de San Antonio en 2011, fue uno de los fundadores de las ferias libres de la ciudad.
Los feriantes de la comuna de San Antonio están de luto. A las 3.45 de la madrugada de ayer partió de este mundo Nelson Héctor Vásquez Lamarque (75), uno de los comerciantes más antiguos y conocidos de las ferias libres de la ciudad.
El deceso se produjo en su domicilio particular de calle Vista Hermosa 1220, donde comenzaron a velar sus restos desde primera hora de ayer. Durante toda la jornada, gran cantidad de feriantes, familiares, vecinos y amigos se acercaron hasta la vivienda de la población 30 de Marzo para entregar las condolencias a su esposa, Carmen Henríquez, y a sus cuatro hijos (Jacqueline, Marta, Nelson y Carlos).
Preso político
La viuda recuerda que ella tenía 15 años -y él 19- cuando decidieron casarse en El Monte. Al poco tiempo emigraron a San Antonio, donde llegaron a vivir a la casa del exalcalde Akin Soto Morales, a quien Nelson Vásquez había conocido a través del Partido Socialista, donde ambos militaban desde jóvenes.
"Para el golpe militar estábamos en la vivienda de Akin Soto, en calle Maestranza (Barrancas), y a mi marido lo detuvieron por razones políticas. Estuvo preso un año y medio en la Escuela de Ingenieros Militares de Tejas Verdes y en la cárcel. A él lo torturaron", rememora Carmen Henríquez sobre uno de los capítulos más duros de los 53 años de su matrimonio.
-¿Cómo fue ese año y medio para usted?
-Fue un tiempo muy difícil porque yo tenía a mis dos hijas chicas y estaba embarazada de mi hijo Nelson. Cuando él salió de la cárcel mi hijo ya tenía 8 meses de vida.
En esa misma época, como una forma de cooperar con el hogar, Carmen comenzó a ayudarle en pequeñas tareas a Hilda Muñoz, quien tenía un negocio en Barrancas. Fue ella, precisamente, quien le propuso que se instalara con un puesto en la feria, que en esos años -mediados de los '70- no tenía más de seis o siete comerciantes. "Yo le respondí que no tenía plata y la señora Hilda me dijo que ella me prestaba el dinero para empezar", revela la ahora viuda.
A partir de ese momento, Carmen Henríquez y Nelson Vásquez iniciaron una "carrera" en la feria que se prolonga hasta hoy. "Cumplimos más de 43 años vendiendo frutas, verduras y porotos, y mi marido fue uno de los fundadores de las ferias libres que hoy existen en la comuna", comenta ella llena de orgullo.
Nelson Vásquez dejó su legado en la feria y en su familia. Hoy sus cuatro hijos y algunos de sus 12 nietos continúan su camino como comerciantes en estos mercados que se instalan en distintos puntos de la comuna.
Enfermedad
El patriarca de esta familia de feriantes recibió el primer golpe a su salud en 2012, cuando sufrió un accidente vascular. Pese a lo complicado de la enfermedad, logró recuperarse y salir adelante. "Pero tres años después tuvo una fuerte caída y se quebró la cadera. De ahí sus fuerzas lentamente comenzaron a decaer", afirma la viuda en el comedor de su casa, cuyas paredes están plagadas de fotos de don Nelson y los suyos, y de recuerdos como el decreto alcaldicio que lo nombró Ciudadano Ilustre de San Antonio en 2011.
"Mi marido era un hombre muy amistoso y bueno para conversar. Fue un muy buen marido y papá", resalta Carmen Henríquez.
Javier Díaz Vásquez (28) y Sebastián Meléndez Vásquez (33), ambos feriantes, valoraron el carácter fuerte y las enseñanzas que les dejó su abuelo. "Él nos enseñó el lado correcto de la vida para no desviarnos por el mal camino. Nos salía a buscar cuando andábamos en la calle", dice Javier.
"Lo que somos se lo debemos a él, porque siempre nos trataba de educar y que anduviéramos derechito. Le decíamos 'papi' porque era como un papá para todos nosotros", agrega Sebastián.
En la familia concuerdan que uno de sus últimos momentos de gran felicidad fue cuando cumplió 50 años de matrimonio con Carmen, con quien se volvió a casar, esta vez en la capilla de Lo Gallardo. "Los hijos y nietos nos prepararon una gran fiesta en una sede de San Juan. Él estaba muy contento y decía que se había casado dos veces: la primera con Carmen Henríquez, y la segunda con Carmen Henríquez", sostiene la viuda.