Poco avance para las familias que luchan por la casa propia
Tras el estallido social, cientos de sanantoninos se tomaron terrenos en la comuna. Algunos abandonaron la causa, mientras que otros siguen con el objetivo de tener su vivienda.
"Por qué si los otros pueden, nosotros no", dijo a Diario El Líder una de las vecinas del pueblito de Leyda, perteneciente a la comuna de San Antonio, que hace una semana se tomó un terreno en este sector rural.
Esta es la última acción de este tipo que se ha realizado en la comuna puerto, tras el estallido social del 18 de octubre. Luego de este fenómeno social, cientos de familias, lideradas principalmente por mujeres, ocuparon terrenos de privados, municipales y también pertenecientes al Serviu.
¿La razón? Indican que la falta de viviendas sociales para la capital provincial y el cansancio de vivir de allegados, en hogares donde incluso habitan más de 10 personas.
En el sector de Bellavista, Sor Teresa, Villa del Mar, Viuda 6, Camino Viejo a Cartagena, incluso hasta en un costado del Instituto del Puerto, muchos sanantoninos se hicieron de un sitio para levantar sus carpas con la esperanza de conseguir la casa propia.
Debido a la preocupación tanto de vecinos de Llolleo como de Bellavista, en donde cerca de 400 familias se tomaron estos terrenos del Serviu, hasta la comuna de San Antonio llegó el director de este servicio para asegurarle a los habitantes que estos terrenos están destinados a la construcción de viviendas sociales para los comités habitaciones Newen 2, Río Bueno y Colinas del Valle.
"se han ido"
Elizabeth Salinas (49) pertenece a la toma Villa Esperanza II, ubicada en Nápoles con Manuel Montt, en el sector Villa del Mar. En este terreno que se tomaron madres solteras, el pasado 8 de diciembre de 2019, se construirá el Cesfam 30 Marzo.
Esta dirigente cuenta que 15 madres se hicieron de un sitio en este terreno porque las echaron de sus casas o porque se aburrieron de vivir de allegados, luego de postular en varias ocasiones a la vivienda.
"Estamos avanzando porque ya estamos trabajando para conseguir nuestras casas. Tuvimos conversaciones con autoridades de la municipalidad y ahora tenemos que juntar 300 mil pesos cada una", dio a conocer la mujer.
Respecto a la construcción del Cesfam, esta dirigente expresó que "sabemos que en este terreno se va a construir y tenemos plazo para salir en este mes, pero no podemos porque no hay nada seguro".
Pese a que deberán salir de este lugar, las 15 madres y los 30 niños que viven en esta toma ya levantaron sus hogares en viviendas de material ligero.
A Leandra Donoso (29), una de las madres que vive en esta toma, se le quiebra la voz cuando explica por qué debió tomarse un terreno.
"A mí me echaron de la casa donde vivía y quedé sola con mis tres hijos. Es difícil estar en esta situación pero hay que seguir porque esto es por un bien mayor", dice esta sanantonina al borde de las lágrimas.
Salinas confesó que "personas que estaban acá se han ido, porque pusimos algunas reglas para ordenar la toma".
"Todos debemos cuidarnos y esforzarnos para conseguir lo que queremos. No es justo que gente que no cumple reciba los mismos beneficios si es que nos resulta todo lo que estamos haciendo. Ahora están las mamás que realmente necesitan sus casas", recalcó.
Construcción
En Manuel Montt con Maule, los vecinos de la toma Nueva Sor Teresa avanzan de a poco en la construcción de sus viviendas. Llegaron hace más de dos meses a este terreno que está destinado a un área verde para este sector.
"Esta área verde se debió entregar como en el año 1997 cuando inauguraron la Sor Teresa, pero nada. Pasamos mucho tiempo esperando y esto finalmente se convirtió en un basural, donde la gente viene a botar animales muertos y desperdicios; además de ser un foco de delincuencia y drogadicción", describió Purísima Blanco, presidenta de la toma "Nueva Sor Teresa".
En este terreno hay 44 familias que se ilusionan con que este sector pase a manos de los propios vecinos. Blanco aseguró que "acá somos gente de la misma Sor Teresa que vivimos de allegados".
"Estamos conformándonos como comité habitacional y para eso estamos sacando la personalidad jurídica. Queremos hacer las cosas bien para que esto funcione", añadió la dirigente.
Un caso parecido es el que viven 34 familias de la calle Cardenal Caro, entre Luis González y Maule. Allí un grupo de vecinos también se tomó un área que estaba destinada a una plaza con juegos y árboles.
Javiera Tapia (24), presidenta de la toma "Sol Naciente", detalló que "los vecinos están construyendo, pero ya tenemos una familia de colombianos que está viviendo acá. Ellos arrendaban y de un día para otro les pidieron la casa".
"Hasta el momento no hemos tenido ningún problema. Sabemos que esto está destinado a un área verde, pero por la escasez de agua se ve difícil que algo puedan hacer. Se supone que como hace 20 años deberían haberlo hecho", mencionó Tapia, quien precisó que si son obligadas a abandonar el terreno lo harán.
Conversaciones
El alcalde Omar Vera aclaró que "si el terreno es de privados, entre el dueño y las personas que se tomaron el terreno deben buscar una solución". En el caso que se busque un desalojo deberán concurrir a la Gobernación Provincial. Esto mismo opera para aquellos terrenos del Serviu.
Respecto a los espacios municipales, el alcalde detalló que "es el municipio el que debe buscar una solución o solicitar el desalojo vía gobernación ".
En el caso donde se va a levantar el Cesfam 30 de Marzo, informó que "hemos conversado con estas madres y estamos buscando una solución".
"El Cesfam está adjudicado y está en el proceso de firma de contrato y toma de razón de Contraloría. Por lo tanto, esperamos en dos o tres meses más la empresa constructora debiese hacerse del terreno", anunció.
"A mí me echaron de la casa donde vivía y quedé sola con mis tres hijos. Es difícil estar en esta situación pero hay que seguir porque esto es por un bien mayor"
Leandra Donoso, madre en toma.