Sanantoninos sufren por la falta de cajeros automáticos en la comuna
Los desmanes del estallido social mermaron la oferta de estos aparatos que ahora, en plena crisis por el coronavirus, se hace evidente y complica a quienes necesitan efectivo.
Primero fue el estallido social el que limitó severamente la oferta de cajeros automáticos en la comuna de San Antonio. Y luego la emergencia sanitaria por el coronavirus hizo más evidente el problema. Claro, porque es un problema hallar un dispensador habilitado para sacar dinero y, si lo encuentra, en todos los casos hay que hacer largas filas y acomodarse al horario bancario que cierra a las dos de la tarde, misma hora a la que dejan de funcionar los cajeros.
En San Antonio hay un par de sucursales bancarias que tienen habilitados los dispensadores de dinero en el horario matinal hasta las 14 horas. Con el mall cerrado y menos sucursales bancarias disponibles, encontrar un cajero automático puede convertirse incluso en una cuestión de suerte.
Eso es lo que pasa en Barrancas y Llolleo donde la oferta se redujo de manera drástica. Están los cajeros de los supermercados del eje Barros Luco que alrededor de las seis de la tarde, con el cierre de las salas de ventas, ya no pueden seguir funcionando, sin contar que para ingresar hay que hacer la misma fila que se hace para entrar al supermercado.
En el centro de Llolleo quedan habilitados el cajero del BCI, en la esquina de Providencia con Echaurren, y los dispensadores de BancoEstado casi frente a la plaza, también con horarios supeditados al funcionamiento de las sucursales bancarias que atienden público hasta las dos de la tarde.
Paciencia
Precisamente en Echaurren con Providencia encontramos haciendo fila a Silvia Olivares. Armada de paciencia esta usuaria reconoce que "es muy complicado encontrar un cajero. Casi nadie acepta transferencias y los bancos están colapsados, entonces hay que tener efectivo y para eso no queda otra que hacer la cola. Fácilmente se te puede ir toda la mañana en el trámite de sacar plata".
Y mientras espera su turno para ingresar al dispensador del BCI, Silvia comenta que "la situación se hace más compleja con la emergencia sanitaria porque a veces toca que tienes que hacer la misma fila que es para la farmacia porque además los cajeros no están abiertos todo el día como antes. Nosotros en Santo Domingo tenemos un solo cajero y ahora aquí en Llolleo me tocó hacer fila en este".
Cuando conversamos con Katherine Arce en la entrada de la sucursal del BancoEstado de Llolleo llevaba dos horas esperando. Fue por un trámite bancario simple, pero en la sucursal los accesos están restringidos y, como sea, toca esperar. "Cuando llegué la fila ya llegaba hasta por allá (señala avenida Providencia hacia el sur) y hay que esperar mucho rato, mantener distancia con la gente, estar lo más separados que podamos y aquí van atendiendo por turnos", dice con resignación.
Sin que la fila avance ningún turno mientras hablamos, esta sanantonina se desahoga diciendo que "a esta hora ya hace calor. Uno se aburre y no queda otra que perder toda la mañana esperando porque aquí mismo este cajero no funciona todo el día, adentro son dos cajas nomás y para el Servicio al Cliente es una sola persona. Así que para cualquier trámite que uno quiera hacer, aunque sea chico, hay que armarse de paciencia nomás".
Desde antes
Isaac Díaz viene saliendo del dispensando del banco Santander en la torre Bioceánica, el único cajero automático que hay en el centro de Barrancas al mediodía del lunes . A la pasada señala que "con todo lo que pasó anteriormente con el estallido social, quedamos sin cajeros para sacar plata, y ahora con toda esta emergencia mira toda la fila que hay que hacer".
Díaz agrega que "sacar plata antes era un trámite súper sencillo, pero ahora es recomplicado porque mira, donde vayas hay filas o los cajeros no están funcionando. Yo antes de llegar aquí pase por el cajero que tiene la Shell de Independencia y perdí el viaje nomás porque no tenía plata. Si hasta las cajas vecinas ahora te tramitan o se complican mucho para pasarte plata".
Antes de seguir con prisa en sus asuntos, dice que "además los cajeros no están abiertos todo el día como antes. La mayoría funciona con el horario del banco, así que si uno quiere sacar plata en la tarde hay que buscar alternativas y ahí se complica todo".
De esta forma, un breve recorrido por la zona comercial de San Antonio permite constatar las dificultades que están teniendo los sanantoninos para conseguir dinero en efectivo. Largas filas, dispensadores que no funcionan o que están derechamente clausurados y un escenario en el que se están aceptando menos transferencias, mientras las Cajas Vecinas -que podrían ser la solución- no siempre están disponibles para entregar dinero.
14.00 horas dejan de funcionar los cajeros que se encuentran en sucursales bancarias.