Corresponsabilidad
por Valentina Stagno, seremi de la Mujer y la Equidad de Género.
Con ocasión de la pandemia que nos afecta en Chile y mundialmente, hemos escuchado con mayor frecuencia la palabra corresponsabilidad, la que tiene distintas dimensiones: corresponsabilidad social y, corresponsabilidad doméstica y de cuidado no remunerado. La corresponsabilidad social tiene por principal objetivo: que todos los actores de la sociedad debemos mejorar las circunstancias y oportunidades para que mujeres que así lo deseen, ingresen al mundo laboral remunerado en igualdad de derechos y condiciones. La corresponsabilidad doméstica y de cuidado no remunerado evidencia la división sexual del trabajo - productivo y reproductivo - y ciertamente que detrás del trabajo productivo hay una gran cantidad de trabajo en ocasiones, no visible.
El escenario de crisis sanitaria evidencia situaciones complejas, como la sobrecarga de las mujeres en relación a las tareas del hogar y de cuidado, la falta de corresponsabilidad afecta de manera directa a las mujeres quienes en situaciones de cuarentena ven como sus tareas cotidianas se ven acrecentadas, pues la mayoría de los cuidados de niños, niñas o adolescentes, adultos mayores y trabajo doméstico es realizado por mujeres, por lo que quedamos más expuestas a padecer enfermedades y a la falta de espacios de descanso y autocuidado, estos últimos son espacios imprescindibles siempre, y que se acrecientan en este momento de crisis sanitaria.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Uso del Tiempo 2015, el 51,9% de las mujeres encuestadas realiza trabajo de cuidados no remunerado al interior de sus hogares, lo que equivale a 3,03 horas diarias en un día tipo. A diferencia de hombres que destinan 1,64 horas al cuidado de integrantes del hogar.
La brecha es mayor durante los días de semana, donde las mujeres destinan 3,27 horas promedio y los hombres 1,79 horas promedio al trabajo de cuidados no remunerado en sus hogares. Si a esto se agrega el trabajo de quehaceres domésticos, el tiempo que destinan las mujeres es de tres horas más a las que realizan exclusivamente para actividades de cuidados (tanto en días de semana como de fin de semana).
Por otro lado, de acuerdo con la Casen 2017, al considerar los hogares que tienen algún integrante con dependencia funcional, se evidencia que el 68,2% de las personas cuidadoras familiares que prestan ayuda son mujeres, mientras que un 31,8% son hombres.
Este es un tema de absoluta relevancia para hablar de empoderamiento y autonomía femenina, la corresponsabilidad social es una forma de no reproducir roles y estereotipos de género asentados histórica y socioculturalmente en nuestro país, hoy tenemos una oportunidad de generar acciones concretas en vías de consolidar la equidad de género y en consecuencia avanzar en el cambio cultural necesario para ser una sociedad equitativa.