Mónica Jorquera Escobar
En una semana una junta de vecinos perdió prácticamente todos sus bienes. El fruto de años de esfuerzo quedó en nada luego de que desconocidos cometieran dos cuantiosos robos.
La madrugada de ayer se registró el segundo atraco que afecta a la sede vecinal Los Alerces de Llolleo. Antisociales llegaron en la noche hasta el inmueble de calle Olegario Henríquez y sustrajeron una gran cantidad de artículos nuevos, que recientemente los vecinos habían adquirido tras adjudicarse un fondo.
Amparados en la oscuridad de la noche, los hampones huyeron con microondas y hornos eléctricos sin uso, un generador de luz, una freidora, parlantes, juegos inflables y hasta mercadería, todo avaluado por la presidenta de la junta de vecinos, Julia Catalán, en 2 millones 500 mil pesos.
La dirigenta subrayó que el atraco de la semana pasada también fue cuantioso, ya que los antisociales atacaron la sala de talleres, desde donde sustrajeron materiales y maquinaria cifrados en un millón 200 mil pesos.
"Con las reparaciones que se harán y lo que se llevaron en los robos, perdimos unos 4 millones de pesos. Es terrible para nosotros, porque todo esto nos costó mucho y ahora tenemos que volver a empezar. Es mucho trabajo tirado a la basura", lamentó Julia Catalán.
Según los mismos afectados, los delincuentes tuvieron que haber ingresado a la sede en la noche y, debido a la gran cantidad de especies robadas, serían más de dos antisociales que andaban movilizados.
Los sujetos forzaron la protección de una ventana para ingresar a robar y, posteriormente, al taller entraron por un forado que realizaron en una pared.
Cancha
La junta de vecinos Los Alerces, que tiene 220 socios, se encuentra junto al estadio del club deportivo Cristo Rey. Debido a la obra sacaron el cierre perimetral que colinda con la sede, la que quedó sin reguardo.
"Esto (el terreno de la obra) quedó abierto, al igual que la misma cancha. Entran como Pedro por su casa al sitio de la sede. Pese a que la casa cuenta con protección en puertas y ventanas, el no tener cierre perimetral ha sido fundamental para que ocurran estos delitos", analizó Catalán.
Agregó que "siempre estamos viniendo a la sede, no está abandonada. Venimos hasta tres veces al día, pero ahora ocurrieron estos robos porque quedó muy expuesta al tener la obra al lado, que más encima está abandonada hace tiempo".
Los dos ilícitos fueron denunciados en Carabineros, pero hasta ayer no había noticia del paradero de los artículos sustraídos.
Llamaron a que si alguien tiene información sobre las especies, dé aviso a la policía.
220 socios tiene la junta de vecinos Los Alerces de Llolleo.
"No saben cuánto esfuerzo hay detrás de estas cosas que nos robaron", se lamentó Catalán.