Vecinos que se unieron en un grupo de Facebook dan un ejemplo de solidaridad
La Comunidad Unida del Tabo nació hace siete años para apoyar a los residentes de la comuna. Por estos días tienen diversas iniciativas con las que buscan ayudar a los más afectados por la pandemia.
Lo que comenzó como un simple grupo en Facebook para que los vecinos de El Tabo pudieran exponer distintas situaciones, con el correr del tiempo se convirtió en una cruzada solidaria.
Hace siete años, Verónica Rojas creó la Comunidad Unida del Tabo como una red de apoyo para los residentes de la comuna.
"Quería que existiera un grupo que fuera un canal de comunicación entre los vecinos; un espacio donde todos pudieran expresarse, dar a conocer sus opiniones y contar lo que los aquejaba", explica Rojas.
-¿Cuál era la finalidad de comunicarse por Facebook?
-Ayudarnos entre nosotros mismos. Sabemos que todos lo podemos pasar mal en algún momento, pero somos los mismos vecinos quienes tenemos que ir dándonos una mano. No hay mayores intenciones de por medio, solo que seamos una comunidad y que no tengamos miedo de pedir ayuda.
Solidaridad
En la medida que el grupo fue sumando más miembros, comenzaron a surgir diversas iniciativas solidarias.
"Buscamos todas las instancias posibles para ayudar a los vecinos o a los miembros de la comunidad que lo necesiten, porque de esta forma les damos un mejor pasar. En invierno lo que más hacemos es arreglar los techos de los adultos mayores, que son quienes están en una situación más complicada por su edad", relata la creadora del grupo.
La entrega de pan, mercadería y las colectas para comprar otros productos son una constante en la gestión del equipo.
Realidades
A diario la página de Facebook recibe cientos de mensajes con solicitud de ayuda de distinta índole.
"Las realidades que hay entre los vecinos son súper distintas, como en todos lados, pero en ocasiones es impresionante y nos deja con la interrogante de qué más podemos hacer por ellos", expresa Verónica Rojas.
-¿Cuáles son las realidades más impactantes?
-En esta comuna residen muchos adultos mayores y son ellos mismos quienes se enfrentan, en muchos casos, a situaciones de abandono. Por ejemplo, ahora a ellos les cuesta más salir e incluso lo tienen prohibido, pero alguien debe ayudarlos y muchos no siempre tienen los recursos para hacerlo. Entonces ahí entramos todos nosotros. Una vez nos encontramos con una señora que tenía una plaga de ratones en su casa. Ahora estamos siempre en contacto con su vecina directa para que la pueda ir a ver todos los días, a la espera de que el municipio pueda ayudarla.
Pese a la gran cantidad de miembros que tiene el grupo en Facebook, Rojas explica que los voluntarios permanentes, que participan en distintas acciones, suelen ser cerca de 10.
Pandemia
Durante la emergencia sanitaria, el grupo y su labor social han tomado más fuerza que nunca. Las ollas comunes se volvieron una actividad habitual en la planificación semanal de ayuda.
"La cesantía en la comuna se ha incrementado y eso tiene una respuesta clara. Aquí la mayoría de los residentes vive del turismo, ya sea arriendo de cabañas u hotelería, artesanía e incluso recorridos turísticos. Si bien todos sabemos que durante el invierno el flujo de turistas es un poco bajo, ahora es peor, porque parte del verano fue malo de alguna forma", asegura Verónica Rojas.
-¿Qué otras iniciativas están desarrollando durante la pandemia?
-Las ollas comunes son la principal. Con ellas tratamos de entregar al menos mil raciones de comida a la semana. Para ello nos ayudamos de locatarios que se mantienen con una buena situación y también con quienes son de Santiago y aún tienen aquí sus residencias de veraneo y nos cooperan con dinero porque se sienten parte de la comuna. Con estas ayudas, más los aportes que nosotros realizamos de manera particular, nos vamos dando vueltas para hacer las ollas comunes, cajas de mercadería y la once que repartimos ciertos días a la semana.
"Campaña política"
Desde la creación del grupo, han surgido muchas críticas acerca de su gestión, principalmente, porque les dicen que solo están generando campaña política para futuras elecciones.
"La gente está siempre hablando que queremos hacer campaña política con nuestra gestión y no es así. Si estamos haciendo política como ellos dicen, sería política social. Nosotros no necesitamos hacer política, porque es algo que no nos interesa. Lo que queremos es que la gente esté unida y así ayudarnos", aclara Rojas, quien, a la hora del balance, prefiere ver el vaso medio lleno. "Somos personas sumamente felices ayudando al resto, si dejáramos de hacerlo, nos sentiríamos vacíos. Fuimos de ayuda también para que otras comunidades replicaran la idea de las ollas comunes y ha funcionado de maravilla. Cosas como esas, nos llenan el alma".