La escuela de Llolleo que en plena pandemia sigue "entregando sonrisas"
En un verdadero ejemplo de solidaridad, la escuela de lenguaje Castillo de Sonrisas realizó una campaña para los niños y adultos mayores que requieren más ayuda.
A diez años de su inauguración, la escuela de lenguaje, jardín infantil y sala cuna Castillo de Sonrisas, de Llolleo, se vio enfrentada a un nuevo desafío: el arribo del covid-19 al país. En vez de preparar las celebraciones de este nuevo aniversario, los profesionales de esta corporación educativa tuvieron que reorganizarse rápidamente para seguir llegando a los niños y sus familias.
"Justo cumplimos 10 años y vino esta pandemia. Nuestro equipo humano es muy valioso, tiene un alto nivel de compromiso y ha enfrentado muy bien la emergencia sanitaria. Este contexto para nosotros no implica que se suspenda el proceso de desarrollo de los párvulos, sino más bien unirnos a la familia, porque en la primera infancia no hay tiempo que perder", sostiene Claudia Silva, la educadora de párvulos y diferencial que dirige el establecimiento, cuya escuela y jardín infantil son gratuitos.
Debido a la emergencia sanitaria, prepararon material educativo para llegar a los estudiantes y sus familias, como cápsulas audiovisuales con actividades y guías educativas. "Las guías son claras para que los apoderados sin ser profesores puedan conocer cuál es el objetivo de las actividades que preparamos para sus hijos", expresa Silva.
"Para nosotros es importante que todos los niños tengan las mismas oportunidades y el mismo acceso a la educación y para eso hay que hacer otras acciones, que si bien no son obligatorias, son necesarias para tener equidad", puntualiza.
Campaña interna
Pero el trabajo de este equipo no se detuvo ahí. "Decidimos llegar con este material a nuestros niños que no tienen acceso a internet. A ellos se les lleva hasta sus casas un pendrive con las cápsulas y las guías impresas. Además, como este año por la pandemia hubo solo siete días de clases presenciales, muchos padres no alcanzaron a comprar los materiales para los niños, entonces la escuela hizo una campaña para entregarles un kit básico para que pudieran realizar las actividades", cuenta la educadora.
Paralelamente, la corporación se organizó para ir en ayuda de los integrantes de toda la comunidad educativa que se han visto afectados por la inestabilidad económica que sufre el país. Silva detalla que "se entregaron cajas solidarias de mercadería para las familias que habían sufrido cambios en sus condiciones laborales y necesitaban apoyo".
A la comunidad
Tras estas acciones, decidieron ir incluso más allá. "Siguiendo esta línea de solidaridad, con la comunidad quisimos ayudar a otras instituciones, como la residencia de lactantes y preescolares Aleah (de Fundación Mi Casa), a la cual le entregamos una donación de útiles de aseo que necesitaban y pañales, sobre todo porque tienen muchos lactantes en ese hogar".
Comprometidos con la educación, además entregaron guías educativas con actividades para los bebés y los niños. "Se hizo un trabajo con las educadoras de sala cuna, porque ese es el grupo principal de la residencia, y se les entregaron videos enfocados en la estimulación y en experiencias tempranas de aprendizaje de los bebés, para que ellas puedan estudiar el material y luego aplicarlo", comenta Silva.
"Para los niños de tres a seis años entregamos el kit de útiles escolares, las guías de actividades y las cápsulas, para que ellos puedan seguir con su educación", añade.
Hogar de ancianos
La última campaña la hicieron en conjunto con los padres y apoderados de la corporación educativa, a la que denominaron "Entregando sonrisas". En esa ocasión, fueron en ayuda del hogar de ancianos Las Tres Marías, ubicado en Santa Lucía 87, Llolleo.
Sobre la ayuda que dieron a los 26 adultos mayores que residen en el recinto, Silva afirma que "nos enteramos por redes sociales que el hogar necesitaba mucha ayuda, por lo que realizamos una campaña de recolección donde participaron integrantes del equipo y apoderados. Reunimos pañales, útiles de aseo y sobre todo ropa abrigada".
"Uno de los hitos que tenemos año a año es dar ayuda a la gente cercana a nuestra escuela. Pese a que vivimos momentos en que todos necesitamos, uno siempre puede ayudar y fue muy enriquecedor contar con la ayuda del personal y los padres y apoderados", destaca la directora de la escuela ubicada en calle Arzobispo Vicuña.
Material gratuito
El material educativo y las cápsulas elaboradas por la escuela están disponibles gratis en el sitio web www.castillodesonrisas.cl. "Todo nuestro trabajo es abierto a la comunidad, es decir, que cualquier niño que vaya a otro jardín o que no esté asistiendo a una educación formal, puede visitar nuestra página y descargarlo. Es muy importante para nosotros compartir nuestro material educativo con otros niños", expresa la directora.