Sanitarias toman medidas para evitar falta de suministro de agua potable
Un estudio ratifica que el caudal del río Maipo irá bajando paulatinamente debido al cambio climático. Las empresas crearon planes para enfrentar el futuro adverso.
La sequía y el cambio climático van de la mano y, lamentablemente, se han unido para poner en una delicada situación a los humanos y a esta sociedad de consumo.
Y aunque los efectos de la falta de lluvia se han percibido con mayor fuerza en los últimos años, el daño viene desde hace décadas. De esa manera, con todo lo que ya ha sufrido el ecosistema, lo más probable es que esos perjuicios se sigan repitiendo.
En este escenario, el futuro del río Maipo, que es la principal fuente de agua para consumo humano en la provincia de San Antonio, no es muy alentador. De hecho, un estudio determinó que sus caudales se verán disminuidos en los meses de verano y primavera hacia mediados y fines del presente siglo.
Dicho análisis, realizado por el Centro de Investigación Cetaqua, fue encargado por la Junta de Vigilancia del Río Maipo, Aguas Andinas y la Sociedad de Canalistas del Maipo, según informó radio Biobío.
En resumen, dicha investigación pronostica que los aportes glaciales al río Maipo serán paulatinamente más reducidos y podrían caer en un 75% respecto de los volúmenes actuales para la época estival.
La situación, que podría variar si se proyecta a corto, mediano o largo plazo, implica la configuración de un complejo panorama para quienes dependen del agua del río Maipo. Aquella circunstancia solo podría eludirse si el mundo entero logra revertir el calentamiento global y con ello pone freno al cambio climático.
En lo inmediato toda esa preocupante aproximación al futuro no tiene efectos en la vida de la gran mayoría de las personas, pese a que ya existen ciudades que han tenido problemas de abastecimiento de agua en la parte norte de la Región de Valparaíso.
Medidas de esval
Consultado por este tema, el subgerente zonal de Esval, Alejandro Pérez, dijo que "pese a que las lluvias de este año nos dan un respiro para los próximos meses, la sequía no se ha superado y la zona donde operamos es una de las más afectadas. Por eso seguimos trabajando para el mediano y largo plazo para seguir brindando un servicio continuo, como lo hemos hecho hasta ahora".
Según el ejecutivo, "en el Litoral Sur estamos ejecutando un relevante proyecto para reforzar nuestro sistema productivo de agua potable de San Juan, con la habilitación de seis nuevos pozos subterráneos. Esta obra, cuya primera etapa esperamos concluir en los próximos meses, tiene una inversión total de más de $4.600 millones y permitirá complementar el aporte superficial del río Maipo, brindando mayor seguridad hídrica a 85.000 hogares de la provincia".
Pérez agregó que "además estamos desarrollando proyectos para lograr una mayor eficiencia y disminuir las pérdidas en la red, a través del control de filtraciones, regulación de presiones e impermeabilización de cámaras y tranques, entre otros. También el aporte de la comunidad es fundamental, por eso, el llamado es a seguir cuidando el agua en todo momento, ya que cada gota cuenta".
Los nuevos pozos de coopagua
Juan Pablo Esturillo, gerente general de Coopagua, comentó a Diario El Líder que la empresa ya ha tomado medidas para enfrentar los escenarios adversos que se darán a corto plazo.
En ese sentido, Esturillo detalló que "nosotros estamos modificando nuestro punto de captación para evitar la intrusión salina en los procesos que concretamos en nuestra planta. Además, para disminuir la dependencia del río Maipo, estamos habilitando nuevos pozos subterráneos".
El ejecutivo de Coopagua reconoció que con el cambio climático "la oferta de agua de los glaciares generada por el deshielo va a disminuir significativamente a mediano y largo plazo, lo que significa un desafío para la industria y un incentivo para promover la innovación y tecnología en el proceso productivo".
El plan de construcción de los pozos y del nuevo punto de captación, que ya comenzó a ejecutar la empresa Coopagua, tendrá un costo de inversión superior a los 200 millones de pesos y con él se pretende asegurar el abastecimiento de agua potable en los meses complicados o de mayor consumo que son precisamente los de verano.
"Nosotros estamos modificando nuestro punto de captación para evitar la intrusión salina en los procesos que concretamos en nuestra planta",
Juan Pablo Esturillo,, gerente general de Coopagua.