Joven murió de un balazo en la cabeza en Cañete
Moisés Orellana, un joven de 21 años, falleció ayer de un balazo en la cabeza en Cañete, en la Región del Biobío, hecho ocurrido minutos después de la quema de unas cabañas en el sector.
Según Carabineros, tres encapuchados armados intimidaron a los dueños de unas viviendas, obligándolos a salir y luego le prendieron fuego a las cabañas. Para huir robaron dos vehículos.
Seis kilómetros más allá, según el subprefecto de la Prefectura Macrozona Sur de la PDI, Carlos Díaz, en un vehículo estacionado estaba Moisés Orellana con dos amigos bebiendo unas cervezas. Por causas no aclaradas, según los policías, se produjo un altercado que terminó con el joven fallecido de un tiro.
"Todos estos actos de violencia se justifican muchas veces en apoyo a los que esos grupos denominan presos políticos. Acá en Chile no hay", dijo el ministro del Interior, Víctor Pérez. "Aquí hay grupos organizados que quieren instaurar una medida de terror", agregó.
El alcalde de Cañete, Jorge Radonich, exigió "que el Gobierno restablezca el derecho de vivir en paz" en la comuna. En tanto, el Ejecutivo interpuso una querella donde vinculó ambos hechos y el senador PPD Felipe Harboe pidió prudencia y esperar el avance de la investigación.