Rodrigo Ogalde Cofré
"El hombre ya se gastó la plata porque es de esos angustiados", dijo ayer José Manuel Alvarez Núñez, un sanantonino de 73 años que trabaja como barrendero en las calles y que el martes, al mediodía, fue víctima de un lanza que le robó el sueldo que recién había cobrado.
La plata, que eran exactos 390 mil pesos, José Álvarez la llevaba en el bolsillo de su polerón cuando, mientras caminaba en una de las veredas de la calle Centenario, específicamente afuera de La Liquidadora, paró para ver si compraba un pendrive con música a una de las vendedoras ambulantes allí instaladas.
Eso hacía este antiguo barrendero cuando un sujeto le sacó el dinero de entre su ropa y huyó raudo hacia la calle Francisco Javier Vera con que iba a ser el sustento del mes para la víctima y su familia.
Álvarez, que trabaja en la empresa Tasuí y por 20 años ha desempeñado este oficio, ha seguido recibiendo su remuneración pese a que desde marzo no concurre a cumplir con sus labores por ser una persona de los grupos de riesgo que pueden contagiarse con covid-19.
El delincuente se perdió con la plata del trabajador. Junto a su mujer, al hombre se le vino el mundo encima.
Ayer, en entrevista con Diario El Líder, asumiendo que difícilmente recuperará ese dinero, José Manuel Álvarez contó que "yo me entusiasmé viendo los pendrive cuando veo a una persona que parece que ya me estaba viendo la plata y al lado había otro, al que se le cayó un celular y se agachó a recogerlo. Ahí creo que el otro me metió la mano al polerón y salió arrancando".
El actuar del ladrón, que estaría identificado por parte de gente cercana a Álvarez, quedó grabado en una cámara de televigilancia que hay en el sector.
Hoy este hombre, que vive junto a su familia en Bellavista, no sabe qué va a hacer. "Me siento mal porque no tengo plata", dijo mientras su esposa confirmó que "era la plata para pagar el agua, la luz y comprar las cosas de la casa".
Y como la justicia seguro tardará en investigar este caso, una de las hijas de este matrimonio funó al sujeto que le robó el sueldo a su esforzado padre. "Esto da impotencia", reconoció Luz Eliana Úbeda.
Algunos amigos de José Manuel Álvarez ya comenzaron a hacer colectas para ayudarlo. Los que quieran cooperar se pueden comunicar con su esposa al teléfono celular +56948689907.