Redacción
La Policía de Investigaciones (PDI) logró la detención de un hombre como sospechoso de haber asaltado y violado a una joven de 21 años mientras esperaba locomoción colectiva en la comuna de La Granja.
El hecho ocurrió cerca de las 15 horas del 12 de octubre pasado. La víctima salió de su casa en dirección a la esquina de las avenidas Combarbalá y Raúl Silva Henríquez con la finalidad de tomar el transporte público. Mientras esperaba en el paradero, un desconocido se le acercó y le preguntó si sabía cuánto tardaría en pasar la micro 226, acto seguido el imputado tomó por la fuerza a la mujer y la obligó a sentarse junto a él.
Según detallaron desde la PDI, el hombre de 38 años inició un diálogo con la víctima, en el que le advertía que tenía una pistola, así que debía entregarle sus pertenencias. La joven, bajo esta fuerte amenaza, le pasó su celular, los audífonos, el cargador, su chaqueta y ocho mil pesos en efectivo. El sujeto con rapidez guardó todo en una mochila negra.
Sin conformarse con esto, el delincuente, que posee antecedentes policiales anteriores por el mismo delito y que fue condenado en 2012, encontrándose actualmente con el beneficio de la libertad condicional, obligó a la víctima a que simulara que era su pareja y la llevó bajo amenazas hacia un callejón, donde procedió a agredirla sexualmente.
Luego, con la intención de seguir robándole dinero a la fémina, la llevó de la mano a un cajero automático de una estación de servicio.
En el lugar, la víctima fue apremiada para que girara el máximo permitido para un dispositivo, 200 mil pesos. Según la investigación, los trabajadores de la gasolinera no sospecharon nada. Incluso algunos clientes entraron y salieron de la tienda.
Sin embargo, la PDI contó que la afectada pidió ayuda a otra joven que se encontraba en una camioneta sin que el imputado se diera cuenta. Esta última alertó a su acompañante, quien se bajó del auto para encararlo. Forcejeó con el delincuente, quien logró huir dejando en el lugar la mochila con lo robado.
La comisaria Marisela Silva, de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisex), contó que la investigación comenzó con el sujeto desconocido desde el 12 de octubre hasta la fecha. "Hubo un trabajo exhaustivo de cámaras de seguridad tanto del lugar del sitio del suceso como del traslado que realizó el imputado con la víctima", dijo.
Las cámaras de seguridad de la estación de servicio fueron clave para dar con el paradero del hombre de 38 años, ya que, mientras estaba en el cajero apoyado con la víctima, mostró un tatuaje en su brazo con el nombre de su mamá, lo que facilitó la búsqueda del individuo.
El sujeto fue formalizado ayer por la fiscalía sur quedando en prisión preventiva.
El tribunal fijó 90 días para esta investigación.