Agencia EFE/N.L.G.

Catar inauguró ayer el cuarto estadio del Mundial de Fútbol 2022, ubicado en la ciudad de Al Rayán, exactamente dos años antes de la final de la Copa, cuya infraestructura está completada al 90 %, según el ente organizador.

El Comité Supremo para la Organización y el Legado explicó en un comunicado que esta fecha fue elegida porque coincide además con el día nacional de Catar y con la final de la Copa del Emir que ganó por 2-1 el Al Sadd de Xavi Hernández a el Al Arabi. Tras la inauguración del estadio, que se convertirá en la nueva sede del club deportivo Al Rayán, se disputó ese partido en el que Xavi Hernández consiguió su cuarto título como entrenador del Al Sadd catarí.

Las instalaciones son la cuarta sede del Mundial 2022 que se inaugura hasta la fecha, después de los estadios Internacional Jalifa, Al Yanub y Ciudad de la Educación.

Al Rayán tiene una capacidad para 40.000 personas y acogerá siete partidos hasta la fase de octavos de final durante la Copa del Mundo, según los organizadores.

"La característica más llamativa del estadio es una fachada resplandeciente, compuesta de patrones que representan diferentes aspectos de Catar: la importancia de la familia, la belleza del desierto, la flora y fauna autóctona y el comercio local e internacional", explicó el Comité.

Agregó que su diseño cuenta con elementos de sostenibilidad y eficiencia para "reducir la huella de carbono del estadio", por ejemplo con el empleo de materiales de construcción reciclados, muchos provenientes del estadio Ahmed Bin Ali, que se levantaba en este lugar anteriormente.

El secretario general del Comité Organizador, Hassan Al Thawadi, destacó que su inauguración hoy es "otro hito importante en el camino hacia 2022. Esta impresionante sede y el recinto circundante dejarán un legado fantástico para el club Al Rayán y todos los que viven en esta ciudad", adyacente a la capital catarí.

"Este evento también marca la cuenta atrás de dos años para el partido más importante en la historia de Catar: la final de la Copa Mundial de la Fifa", agregó Al Thawadi.

El club alemán Schalke 04, uno de los históricos del país, despidió ayer al técnico Manuel Baum y entregó el cargo nuevamente al experimentado Huub Stevens. El holandés regresa a Schalke en su cuarto periodo con el equipo para dirigir los últimos dos partidos del año. Schalke se encuentra en el último lugar de la tabla de la Bundesliga con tan solo cuatro puntos luego de 12 jornadas y trata desesperadamente de poner fin a una racha de 28 partidos seguidos sin victorias en la liga, un récord del equipo. La derrota del sábado de 2-0 en casa ante Friburgo fue el último encuentro con Baum en el banquillo.

El director deportivo del club, Jochen Schneider, dijo que el encuentro de hoy ante el Arminia Bielefeld es de "enorme importancia" para el equipo. "La decepcionante actuación frente a Friburgo nos mostró que el equipo necesita un nuevo impulso", destacó Schneider.

Un meritorio empate 1-1 ante Brasil en la Granja Comary consiguió la selección Sub 20 para cerrar su participación en el torneo preparatorio de cara al Sudamericano de febrero con miras al Mundial.

La selección tuvo vistosas actuaciones. Por ejemplo el portero Juan José Echave tapó un penal al segundo minuto de partido. Acto seguido, la Roja sorprendió abriendo la cuenta a través del delantero Gonzalo Tapia, una de las figuras más promisorias de la escuadra del DT Patricio Ormazábal.

Lamentablemente el equipo no pudo sostener el marcador y los brasileños empataron gracias a un tanto de Caue. Pese a eso, el equipo terminó invicto tras los triunfos 2-1 sobre Perú y 2-0 con Bolivia.

"Contento por lo grupal y colectivo, los esfuerzos hechos. Los jugadores tuvieron disposición de hacer lo que le pedimos ante un gran rival. Estuvimos a la altura. No habíamos tenido la posibilidad de jugar amistosos y nos sirve para ver a los jugadores, muchos no tenían experiencia en selecciones", dijo Ormazábal sobre el balance de lo hecho.

"Un torneo que nos sirve mucho, fueron tres partidos de un nivel que es de Sudamericano, muy exigente", añadió el volante Vicente Pizarro.