Comerciantes de Cartagena trabajan para darle un nuevo impulso al turismo
La pandemia, la delincuencia y el comercio ambulante son algunos de los obstáculos que los locatarios enfrentan en los últimos meses.
El turismo es uno de los rubros más afectados desde que la pandemia llegó al país y a la provincia. Es tan duro el golpe, que la falta de visitantes también trajo coletazos no solo a quienes viven directamente de esta actividad. Muchos comerciantes se vieron obligados a reinvertir y reinventar sus negocios debido a los protocolos sanitarios, pero en ese camino muchos se vieron obligados a bajar sus cortinas.
"Las deudas se fueron acumulando, al igual que el arriendo, y al final a muchos comerciantes no le quedó más opción que cerrar sus locales", contó Adela Córdova, presidenta de la Cámara de Comercio de Cartagena.
La comerciante asumió la presidencia de la agrupación tras una masiva votación que se efectuó vía zoom en agosto pasado, cuando el coronavirus estaba en su momento más álgido.
A pesar del poco tiempo que llevan funcionando como cámara, sus integrantes, pertenecientes a diversos rubros del comercio, tienen claro que la tarea de reimpulsar el turismo en la comuna no será fácil. Aún así, los 300 socios que hoy forman parte de la Cámara Comercio de Cartagena saben que mientras trabajen unidos pueden conseguir sus objetivos.
"Entre septiembre y diciembre volvimos a abrir nuestros negocios. Tuvimos un veranito de San Juan. Nos fue muy bien, vino mucha gente y pudimos trabajar a pesar de que el aforo era muy poco. Cuando aparecieron los primeros videos mostrando la violencia que se estaba viviendo en la comuna, de inmediato empezó a bajar la llegada de turistas", explicó la presidenta.
"También nos perjudicó que Santiago retrocediera en fases porque más bajó la llegada de público y al final quedamos de brazos cruzados", añadió la locataria.
Delincuencia
La delincuencia es un tema que preocupa a quienes viven del turismo y del comercio, principalmente porque se sienten muy expuestos a sufrir un robo o ser víctimas de un asalto. Los comerciantes saben que recuperar la confianza del turista es primordial en el desafío que hoy enfrentan.
"Los delincuentes ya no tienen piedad con nadie. Ahora matan por nada", aseguró Margarita Montenegro, tesorera de la cámara.
"Necesitamos más seguridad porque Cartagena ha crecido mucho en cuanto a población. Tuvimos una reunión con el general director de Carabineros, donde él fue muy comprensivo cuando le presentamos nuestras problemáticas porque al final lo que nosotros necesitamos son más refuerzos, tanto de Carabineros como de la PDI", explicó la comerciante.
Según Adela Córdova en el balneario son muchas las mujeres que trabajan solas en sus locales y eso se ha transformado en un riesgo constante para ellas. "Sabemos que vienen más refuerzos para enfrentar el verano y eso nos deja un poco más tranquilos".
Ambulantes
Otro de los problemas que causa fuertes dolores de cabeza al comercio local, especialmente en esta época del año, es la masiva llegada de ambulantes. El trabajo que está efectuando la cámara de comercio también busca una solución definitiva.
"El año pasado con tema del estallido social nosotros lo pasamos mal porque Cartagena se llenó de ambulantes y no se podía hacer nada. Vendían droga, alcohol, había comercio sexual y nadie podía hacer nada", afirmó Adela Córdova, quien tiene un hostal y un restaurante en la Playa Grande.
Ayuda
Tanto Adela Córdova como Margarita Montenegro reconocen que reimpulsar el turismo y el comercio en la comuna será un trabajo duro, principalmente por la pandemia que hoy nos afecta, pero "si las autoridades nos escucharan todo sería distinto".
"Como cámara de comercio necesitamos de mucha ayuda. Debemos recuperar nuestros espacios porque cuando todo esto pase debemos volver a ser lo que éramos. Es necesario que los cartageninos podamos caminar libremente por la terraza sin miedo a ser asaltados", recalcó Adela.
Los comerciantes cartageninos saben que "Cartagena es una comuna pobre y popular y así nos muestran. En la tele solo salen los hechos de violencia o el melón con vino en la playa, pero nadie muestra el turismo considerando todo el potencial que tiene Cartagena", explicó Margarita Montenegro
Socios
Víctor Fichelman, propietario del restaurant Mary Queen en Playa Chica, es uno de los 300 socios de la renovada cámara de comercio cartagenina.
"Siento que esta vez no estamos solos. Tenemos apoyo del alcalde, de la gobernadora, pero aún falta. Se necesita gestión y eso hace la cámara, y lo ha hecho muy bien porque a pesar del poco tiempo ya lograron tener reuniones con Carabineros y la PDI para ver el tema de la seguridad y de la delincuencia", destacó Fichelman.
"Tenemos que dejar de pensar un poco en el turista que viene de Santiago, porque ahora mis clientes son las personas que viven en esta comuna",
Víctor Fichelman