Dueños de restaurantes dicen que retraso del toque de queda en una hora "no es suficiente"
Solo como "una pequeña ayuda" calificaron los dueños de restaurantes de Llolleo el cambio en el horario de toque de queda, que a partir de esta noche comienza a las 23 horas.
Tomás Montalva, propietario y administrador del Cheer de Llolleo, opinó que "es una medida que ayuda un poco a un sector tan golpeado por la pandemia como el nuestro, pero que termina siendo insuficiente a la larga. Más que controlar la pandemia, el toque de queda termina presionando a la gente y provocando aglomeraciones".
A la hora de analizar el lado positivo de la medida, Montalva comentó que "a nosotros nos va a dar una hora más de funcionamiento de la cocina y con ello más posibilidades de recaudar como negocio y también a nuestros colaboradores".
"El horario de toque de queda y el cierre del comercio más temprano termina estresando aún más a las personas a la hora de hacer sus compras o de disfrutar de una tarde luego del trabajo", expresó el emprendedor del Cheer.
Felipe Jara, dueño y administrador del Bahiao, indicó que "finalmente todo este tipo de modificaciones, aunque no sean las ideales, suman y nos dan un poquito más de espacio para trabajar, y que tanto nosotros como nuestros empleados podamos continuar desempeñando nuestras labores para tener más ingresos".
Juan Ignacio Bustamente, propietario de La Cuina, explicó que "para nosotros es algo positivo. Aunque sea una hora más, finalmente nos sirve para poder continuar funcionando y que nuestro restaurante siga adelante. La pandemia nos ha golpeado duro, primero cuando tuvimos seis meses cerrados y ahora con todos los cambios que se han presentado al retroceder a fase 2".
"Hubiésemos querido que fuera hasta las 00.00, pero por lo menos ahora tendremos una hora más", añadió.