En más de una oportunidad han funcionado en la comuna de Santo Domingo sucursales u oficinas de las reparticiones bancarias.
Ha sido una muy buena solución. Lamentablemente no han tenido una permanencia, por distintas razones.
Lo concreto es que se hacen necesarias estas reparticiones, para una comuna que tiene muchos usuarios, no solo del área residencial, sino también de la amplia zona rural.
Con San Antonio en cuarentena y Santo Domingo en retroceso a Fase 2, la necesidad aumenta. Sería útil no solo para los usuarios, también para las entidades bancarias. Ojalá los responsables de ellas piensen lo mismo.
Tito Elgueta