Boris Johnson es asediado por la remodelación de su hogar en Downing Street
Un crispado primer ministro británico Boris Johnson compareció ayer ante la Cámara de lo Comunes, donde fue cuestionado por las eventuales irregularidades que habría en el financiamiento de la remodelación de su hogar oficial, y que se encuentran bajo investigación formal.
Consultado sobre quién pagó "inicialmente" las obras, el líder conservador respondió: "He pagado por la reforma de Downing Street personalmente. Y cualquier nueva declaración que tenga que hacer la haré bajo el consejo de Lord Geidt", su nuevo asesor independiente.
Las dudas surgieron luego de que su antiguo superasesor e ideólogo del Brexit, Dominic Cummings, difundiera que en 2020 Johnson buscó que "donantes pagasen en secreto" los trabajos de remodelación del edificio de gobierno.
Los primeros ministros tienen hasta 34.500 euros (29 millones de pesos) para dejar a su gusto la residencia, pero según el Daily Mail el proyecto de Boris Johnson fue 66.000 euros (cerca de 56 millones de pesos) más caro.
El líder de la oposición, el laborista Keir Starmer, le dijo que sólo hay cuatro opciones: que las obras las pagaron los contribuyentes, el Partido Conservador, un donante privado o el propio primer ministro, duda que un molesto Johnson no despejó.